Schröder se lanza a la reconquista política del este de Alemania
El canciller federal alemán, el socialdemócrata Gerhard Schröder (SPD), inició ayer una gira de dos semanas por los cinco estados federados del este de Alemania con una clara intención política: recuperar la confianza de los ciudadanos de la desaparecida República Democrática Alemana (RDA). La lucha contra el neonazismo y el paro tienen un puesto destacado en el mensaje que Schröder trata de transmitir en su largo viaje.Los medios de comunicación alemanes han acogido con una cierta sorna estas dos semanas de viaje de un canciller dentro del país, y en plena penuria informativa agosteña. El semanario Der Spiegel apareció ayer en la portada con un fortomontaje que mostraba a Schröder vestido de explorador africano, bandera alemana en ristre, bajo el titular: 'Expedición a un país desconocido'. El programa de mediodía de las dos cadenas nacionales de la televisión pública alemana fue más cruel y tituló la gira como 'Viaje de exploración al salvaje este'.
El experimentado redactor de Der Spiegel Jürgen Leinemann resume las intenciones del viaje de Schröder al este: poner en la picota al extremismo de derecha y esparcir optimismo. Menester lo tienen, tanto el canciller como los alemanes del este, los llamados, con una cierta connotación negativa, ossis.
Paro y xenofobia
Cuando se acerca el décimo aniversario de la reunificación alemana, el paro en el este, un 17%, es más del doble que el del oeste de Alemania, y la población desciende de forma alarmante. Por añadidura, en el este de Alemania, donde se concentra un porcentaje ínfimo de extranjeros, se baten todas las marcas de actos de violencia xenófoba.Según una encuesta, a la pregunta "¿Se interesa bastante el canciller Schröder por la Alemania del este?", un 59% de alemanes orientales responde no y sólo un 31% sí. Schröder ganó las elecciones en septiembre de 1998 gracias en buena parte a los votos de los ossis, decepcionados de un Helmut Kohl que les había prometido "paisajes florecientes" tras la reunificación. Recientes estimaciones aplazan hasta el año 2030 la fecha en que el este alcanzará el nivel del oeste de Alemania.
Tras la victoria electoral, el SPD inició una caída en picado en las elecciones en los Estados federados del este y llegó incluso a bajar por debajo de los poscomunistas del Partido del Socialismo Democrático (PDS). Beneficiado del desastre democristiano, tras la implicación del ex canciller Kohl en la financiación ilegal del partido, Schröder ha recuperado la iniciativa y cree llegado el momento de iniciar la reconquista del este. Al mismo tiempo, el canciller se pone al frente de la lucha contra la violencia ultraderechista, racista y xenófoba. No puede haber escogido Schröder ni lugar ni momento más adecuados para esta misión. El este alemán, con sus agravios pendientes y tras 40 años de dictadura prusianoestalinista, parece terreno abonado para los neonazis.
Tu suscripción se está usando en otro dispositivo
¿Quieres añadir otro usuario a tu suscripción?
Si continúas leyendo en este dispositivo, no se podrá leer en el otro.
FlechaTu suscripción se está usando en otro dispositivo y solo puedes acceder a EL PAÍS desde un dispositivo a la vez.
Si quieres compartir tu cuenta, cambia tu suscripción a la modalidad Premium, así podrás añadir otro usuario. Cada uno accederá con su propia cuenta de email, lo que os permitirá personalizar vuestra experiencia en EL PAÍS.
En el caso de no saber quién está usando tu cuenta, te recomendamos cambiar tu contraseña aquí.
Si decides continuar compartiendo tu cuenta, este mensaje se mostrará en tu dispositivo y en el de la otra persona que está usando tu cuenta de forma indefinida, afectando a tu experiencia de lectura. Puedes consultar aquí los términos y condiciones de la suscripción digital.