_
_
_
_
_

Un informe de Renfe culpa a Repsol del vertido de 60.000 litros de gasóleo al alcantarillado

Renfe se lava las manos con respecto al vertido de 60.000 litros de gasóleo que se derramaron por el alcantarillado el pasado día 12 procedentes de las cocheras de trenes de Fuencarral y asegura que no tiene responsabilidad alguna de lo ocurrido. La compañía ferroviaria ha elaborado un informe en el que ratifica que el vertido ocurrió por una avería en una válvula de sus depósitos de combustible. El documento añade que el mantenimiento de la instalación corresponde a Repsol, según establece un convenio firmado entre ambas compañías, renovado en marzo.

El gerente de medio ambiente de Renfe, Pedro Pérez, se recorrió ayer Madrid con tres copias de ese informe en la mano. Las entregó, una por una, en el Ayuntamiento de Madrid, la sede de la Consejería de Medio Ambiente de la Comunidad y en las dependencias del Servicio de Protección de la Naturaleza de la Guardia Civil.El informe, elaborado por los técnicos de la compañía ferroviaria, aclara lo ocurrido en la mañana del 12 de agosto en el Centro de Mantenimiento Integral de Trenes de Renfe, situado a un kilómetro, en dirección norte, de la estación de Chamartín, en el distrito de Fuencarral.

El documento señala como causa del vertido la rotura de una válvula de retención de líquido -que impide que el combustible salga del depósito- por un fallo técnico del material en el cuarto de máquinas del mencionado centro, según informa Europa Press.

"Se observa la rotura del degollamiento de la brida de la válvula de retención situada en la tubería de impulsión del producto al depósito de almacenamiento", según consta en el documento. La traducción de estos técnicismos aclara que el derrame ocurrió por una avería técnica, por un fallo en el mecanismo interno de la válvula, según Renfe.

El informe de la empresa ferroviaria añade que es Repsol, la empresa suministradora, la responsable del mantenimiento de las instalaciones, "según se plasmó por escrito en un convenio firmado entre Renfe y Repsol, que fue renovado el 13 de marzo de este año". La petrolera inspecciona la instalación seis veces al año, según Renfe.

El informe explica al detalle cómo se originó el vertido. El camión cisterna de la compañía Transóleo, SA, llegó a las 7.25 del 12 de agosto a las instalaciones de Repsol. Iba a realizar un suministro de 786 litros de gasóleo. Un operario de Renfe abrió el cuarto de máquinas de los depósitos y el conductor del camión cisterna realizó la toma con la manguera para proceder a suministrar el combustible.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

Quince minutos más tarde, el chófer del camión comunica al operario de Renfe que algo se había averiado y que se estaba vertiendo el combustible. Ambos regresaron a la sala de máquinas para tratar de frenar el derrame. Intentan cerrar la válvula de cierre del depósito, pero no pueden "porque estaba agarrotada", según el informe. Con ayuda de una barra metálica y un líquido afloja-todo lo logran a las 8.00.

El fallo de mantenimiento -el de la válvula de cierre del depósito principal, que estaba agarrotada- generó que el vertido fuera mayor del que hubiera sido de haber funcionado correctamente, señala el informe.

El operario de Renfe se lo comunica a los responsables de la instalación y éstos, a su vez, al puesto de mando de la estación de Chamartín, quienes dan el aviso al teléfono de emergencias 112.

La Policía Municipal recibe el aviso del 112 y alerta al Ayuntamiento. El edil de Medio Ambiente, Adriano García-Loygorri, ordena que todas las depuradoras de Madrid cierren sus compuertas para evitar que el vertido contaminante llegue al Jarama. El edil acusó entonces a Renfe de no avisar a tiempo. Pero Renfe afirma ahora que actuó "en cumplimiento de la normativa vigente sobre notificación de accidentes en los transportes de mercancías peligrosas".

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_