Francia deja a los Concorde en tierra pese al informe sobre el accidente

El ministro de Transportes francés, Jean-Claude Gayssot, decidió ayer que los cinco Concordes de la flota de la aerolínea Air France deberán seguir en tierra. El ministro estima que las explicaciones proporcionadas por la BEA (Oficina de Encuesta de Accidentes), sobre las causas del accidente ocurrido el 25 de julio en el aeropuerto parisino de Roissy, no son suficientes como para borrar todas las dudas sobre la fiabilidad del único avión supersónico de pasajeros en servicio. Los Concorde franceses no vuelan desde aquel día por orden del Gobierno.La BEA lanzó el jueves la hipótesis de que la misteriosa lámina metálica de 40 centímetros encontrada en la pista de aterrizaje después del accidente, provocó el reventón de uno de los neumáticos del aparato, cuyos fragmentos, proyectados con gran fuerza y velocidad, agujerearon los depósitos de queroseno y precipitaron el desastre que le quitó la vida a 113 personas.

Gayssot se ha limitado a tomar una medida, sin precedentes en Francia, en nombre del "principio de precaución". El problema para la autoridades es que, tras una reacción emocional inmediata al accidente, no pueden satisfacer esa expectación ciudadana y encontrar una explicación clara y completa de las causas del accidente.