10.000 alegaciones contra la instalación de un 'macrovertedero' en Torrejón de Velasco

La polémica sobre el proyecto para la instalación de un macrovertedero industrial en el término municipal de Torrejón de Velasco (1.600 habitantes) se acentúa. La Plataforma Contra el Macrovertedero interpuso ayer en el registro de la Consejería de Obras Públicas 10.000 alegaciones contra la ejecución del proyecto. Sus alegaciones se suman a la oposición de los ecologistas, del Museo de Ciencias Naturales, que trata de proteger un yacimiento paleontológico, del PP de Castilla-La Mancha y de los municipios de Valdemoro y Seseña. Torrejón se queda solo en defensa del proyecto.

Una treintena de miembros de la Plataforma contra el Macrovertedero de Torrejón de Velasco, entre ellos alcaldes, concejales y ecologistas de la zona sur, acudieron a la Consejería de Obras con cajas repletas de papeles. Eran las 10.000 alegaciones que la plataforma ha presentado contra el proyecto para la construcción de una planta de reciclaje de residuos industriales en un paraje sito en el límite con la provincia de Toledo.El coordinador de la plataforma, Mario Hernández, declaró: "Hemos conseguido dar, una vez más, muestra de la gran oposición ciudadana que hay en Torrejón de Velasco y en los municipios vecinos contra el vertedero", manifestó. "Y todavía quedan las alegaciones de otras localidades, que se traerán la semana que viene", añadió. Hernández se muestra optimista: "Esperamos que esto sirva para que la Comunidad paralice definitivamente esta instalación", explicó a Efe. El alcalde de Parla, Tomás Gómez, del PSOE, fue el más belicoso en sus declaraciones: "Si no admiten nuestras alegaciones, habrá una batalla a muerte para que no se construya el vertedero". El PP de Castilla-La Mancha anunció ayer su intención de sumarse a las alegaciones (el plazo sigue abierto durante unos 15 días).

Las 10.000 alegaciones presentadas están sustentadas en razonamientos ecológicos, paleontológicos, de salubridad y urbanísticos. Se suman a las interpuestas por otras instituciones en diciembre de 1999, cuando la Consejería de Medio Ambiente dio el visto bueno al proyecto. El Museo Nacional de Ciencias Naturales alegó entonces que el futuro vertedero, cuya ubicación está prevista en el cerro de los Batallones, afectaría al yacimiento paleontológico descubierto en ese mismo paraje. El paleontólogo que dirige la excavación a pie de obra, Jorge Morales, del Centro Superior de Investigaciones Científicas, se opone a enterrar bajo los vertidos los restos hallados, de mastodontes y otros animales que habitaban la región hace diez millones de años.

Los huesos fosilizados de dos mastodontes, tigres de sable y antecesores del león, el lobo, la hiena, jirafas de cuatro cuernos y otros animales, ponen en peligro la ejecución del proyecto. "Habrá que buscar una ubicación alternativa", mantiene. El propio coordinador del área de Paleontología de la Consejería de Educación, Antonio Méndez, se muestra contrario al proyecto: "Es uno de los yacimientos más valiosos de Europa y no vamos a permitir que se destruya", afirmó.

La asociación Ecologistas en Acción alega que el macrovertedero divide el territorio de una colonia de avutardas que habita en la zona. La avutarda es un ave esteparia, en peligro de extinción y considerada por los biólogos como el ave más grande capaz de volar. El portavoz de la asociación ecologista, Santiago Martín Barajas, afirma que el proyecto está promovido por "la empresa Cartera Ambiental, que tiene un historial repleto de infracciones en materia de gestión de residuos en una planta de Ajalvir y contra la cual han interpuesto numerosas denuncias los vecinos de la localidad".

"Sustancias no deseadas"

Valdemoro y Seseña (Toledo) se oponen al macrovertedero. Valdemoro afirma que la ubicación elegida dista apenas dos kilómetros de una urbanización: "Los vientos dominantes pueden empujar sustancias no deseadas y perniciosas a la zona habitada, deteriorando la calidad del aire", según el Consistorio.El gobierno local de Seseña, del PSOE, afirma que el vertedero conlleva "un riesgo de contaminación para los acuíferos de la zona" y los 4.500 habitantes de la localidad se abastecen de aguas subterráneas, afirmó ayer el edil de Juventud y Deportes, David Fuentes (PSOE).

Una empresa privada promueve la construcción del vertedero, que fue aprobado inicialmente por el Ayuntamiento de Torrejón, recibió el visto bueno de Medio Ambiente y ahora está en periodo de alegaciones en la Consejería de Obras, que decidirá en septiembre si se construye o no.

El proyecto del vertedero tiene una extensión de 23 hectáreas, repartidas en tres grandes áreas. En la primera, con capacidad para 35.000 toneladas, se tratarán residuos especiales urbanos, neumáticos y habrá una balsa de agua para el reciclado de desechos líquidos industriales. La segunda, un vertedero controlado con capacidad para 60.000 toneladas. Y la tercera almacenará combustibles usados, productos químicos, lodos y aceites.

"La planta de reciclaje de resíduos industriales supondrá una contribución muy positiva al desarrollo económico y social del municipio", según explicó el edil de Medio Ambiente de Torrejón, Juan Antonio García, del PSOE. "No implica riesgo alguno para la salud de los vecinos ni contaminará el agua ni el aire".