Los impulsores de Nueva Vía dan por eliminada a esta corriente
Posiciones ideológicas
Nueva Vía ha muerto. Así lo han decretado sus impulsores después de que el 35º Congreso del PSOE eligiera el pasado domingo con un respaldo del 90% a la Ejecutiva Federal que propuso el nuevo líder socialista, José Luis Rodríguez Zapatero. "No éramos una familia, ni pensábamos crear un sector, nuestro objetivo era llegar al Congreso Federal y teníamos decidido que fuera cual fuera el resultado, Nueva Vía iba a morir ese mismo día". Así de categórico lo explica Jordi Sevilla, nuevo responsable al frente de la Política Económica del PSOE y uno de los impulsores de este "grupo de reflexión" junto a Trinidad Jiménez, Jesús Caldera, Juan Fernando López Aguilar y José Luis Rodríguez Zapatero. Luego fueron muchos más.Con toda naturalidad, Trinidad Jiménez, responsable del área Internacional de la Ejecutiva, afirma que Nueva Vía nació, precisamente en una reunión en su casa, una semana después de las elecciones del 12 de marzo "con carácter instrumental" para poder participar en el debate precongresual del PSOE.
En ese momento, una serie de miembros del PSOE, en su mayoría parlamentarios, coincidieron en la preocupación de que, tras la derrota electoral, el desánimo cundiera por la organización y el "enorme capital" del PSOE, basado en la "valía de mucha gente" se perdiera. Su recorrido ha terminado en el triunfo. "Nueva Vía ya no existe, la dirección que salió el domingo del Congreso es de todo el partido, se acabaron las etiquetas", sentencia Trinidad Jiménez.
Otras etiquetas, sin embargo, no han desaparecido, como son las que se refieren al supuesto carácter "neoliberal" que anima las posiciones ideológicas de este grupo. Sus referencias a la libertad, a los emprendedores, a la reasignación del papel del Estado, sirvió a los partidarios de otras candidaturas a la secretaría general para situarles de inmediato en el ala derecha del PSOE. Ellos lo niegan, e incluso se quejan de que se excluyan de sus textos las citas completas. Jordi Sevilla asume la crítica contra los que les niegan su carácter de izquierdas y cita, para darle la razón, a Matilde Fernández, candidata hasta el domingo a la secretaría general del PSOE y adscrita al sector guerrista. "Esta compañera citó a Fernando de los Ríos, al decir que él defendía el liberalismo del bueno, no el de Thatcher; me sentí reivindicado". Jordi Sevilla recuerda la frase clásica de ese prócer del socialismo que se sentía "socialista a fuer de liberal". "El liberalismo del que hablamos no es económico, es el de la Revolución Francesa, el de la extensión de los derechos a todos los seres humanos", concluye Jordi Sevilla.
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