ETA golpea en Getxo con otro coche bomba frente a la casa de una senadora del PP

Justo un mes después del último coche bomba en Getxo, que causó cuantiosos destrozos, ETA volvió ayer a golpear en este municipio vizcaíno. Fue el mismo, método aunque esta vez tuvo un objetivo más concreto: frente a la casa de la senadora del PP, Pilar Aresti, quien acababa de entrar en su domicilio pero resultó ilesa. Cuatro personas sufrieron heridas leves, con cortes producidos por cristales rotos a causa de la onda expansiva. El fuerte estruendo se escuchó en todo Getxo, así como en Portugalete, separado por la ría del Nervión. También allí varias viviendas sufrieron la rotura de cristales.

La explosión del coche-bomba, un Fiat Tipo matriculado en San Sebastián, se produjo hacia las 20.20 en la calle de José Amann, 12, una de las zonas residenciales de Neguri donde habitan destacados industriales vascos. La forma de actuar de ETA fue prácticamente idéntica a del pasado 24 de junio, cuando la organización terrorista hizo estallar una potente bomba en la calle Manuel Smith, situado a escasos 400 metros del atentado de ayer. Entonces también hubo una llamada anónima al diario Gara,que avisó de la colocación de un coche bomba dirigido contra la "oligarquía financiera" y con un plazo de tiempo de 15 minutos. Ayer, ETA tuvo un objetivo más concreto: el domicilio de la senadora popular Pilar Aresti.

Aresti, sobrina de Enrique de Aresti, que fue asesinado el 25 de marzo de 1980 por no pagar el llamado impuesto revolucionario, estuvo en la mañana de ayer en Madrid en la reunión de la Ejecutiva del PP y acababa de llegar a su casa de Getxo cuando se produjo la deflagración. El aspecto de la zona era dantesco: la vivienda sufrió grandes desperfectos materiales, con todos los marcos de las ventanas de los tres pisos arrancados de cuajo así como las claraboyas del tejado y multitud de ventanas destrozadas y cristales por doquier. A primera vista, los daños causados, aunque cuantiosos, son menores que los de la explosión de hace un mes.

Cuatro personas resultaron heridas, una de ellas un ertzaina,que estaba acordonando la zona,aunque de carácter leve debido al desprendimiento de cristales de las ventanas. La Asociación de Ayuda en Carretera, DYA, envió tres ambulancias, que además de estos cuatro contusionados, atendieron a cuatro personas más debido a ataques nerviosos. Una hora después de la deflagración, la DYA seguía ocupandose de los afectados.

Algunos de los presentes se fueron poniendo nerviosos según transcurría el tiempo sin tener noticias de sus familiares. La Ertzaintza, de forma espontánea, estuvo en la zona calmando a los presentes. Vecinos del barrio paseaban con sus hijos, minutos antes del atentado, por esta zona, ya que la calle afectada se encuentra cerca del paseo marítimo de Getxo, muy transitado en esta época del verano.

La policía avisó diez minutos antes de la explosión a los vecinos de la calle Amann aconsejándoles que se retiraran a un lugar seguro en sus hogares y lejos de las ventanas. Incluso algunos fueron advertidos por teléfono. El primer representante del PP en llegar al lugar del atentado fue el diputado Antonio Merino. Luego acudieron el alcalde de Getxo, Iñaki Zarraoa, y el diputado foral de Acción Social, Ricardo Ansotegi, que fueron recibidos con insultos y abucheos por vecinos de las casas afectadas.

Minutos después, a través de un comunicado, la dirección vizcaína del PNV expresó su "más absoluta repulsa y condena" por el atentado y transmitió su "solidaridad a todos los afectados por este acto terrorista". Para el presidente peneuvista de Vizcaya, Iñigo Urkullu, "este nuevo acto terrorista tiene como único fin y objetivo asustar a la sociedad vasca, utilizando la violencia y el terror como único instrumento y argumento".

La zona donde se produjo el atentado fue rápidamente acordonada por la policía. Agentes de la Guardia Urbana de Getxo inspeccionaron los inmuebles de las inmediaciones con el fin de comprobar el estado de las estructuras de los edificios, ya que la calle donde se produjo la explosión es muy estrecha.

El de ayer fue prácticamente una réplica del atentado con coche bomba perpetrado el pasado día 24 de junio. Entonces, un Mercedes cargado con 50 kilos de explosivos hirió a seis personas y causó graves destrozos en las viviendas localizadas en un radio de 200 metros. Ése fue el inicio de la ofensiva etarra de este verano.