_
_
_
_
_

Fomento arranca las obras de la nueva terminal de Barajas con dos años de retraso

El ministro de Fomento, Francisco Álvarez-Cascos, puso ayer la primera piedra de la nueva terminal de Barajas, "la mayor actuación aeroportuaria en fase de construcción en el mundo", según sus autores. La obra tenía que haberse iniciado hace dos años, pero continuas modificaciones y ampliaciones del proyecto original han retrasado su comienzo. El edificio, con un presupuesto de 90.150 millones de pesetas, será uno de los mayores de Europa con 470.261 metros cuadrados. Tendrá 37 puertas de embarque y 174 mostradores de facturación para dar servicio a 10.400 pasajeros en hora punta (más de 35 millones durante el año).

Más información
FOTO SIN TITULO
Álvarez-Cascos: "Muchas gracias por todo, Rafa"

El ministro de Fomento reclamó ayer a los constructores la máxima calidad para el proyecto y el cumplimiento de los plazos previstos de esta obra (40 meses).La gigantesca obra de la nueva terminal de Barajas estará concluida en otoño de 2003. Antonio Lamela, uno de los arquitectos autores del proyecto junto al estudio de Richard Rogers y las ingenierías Initec y TPS, considera la terminal como "la más importante de Europa y, sin duda, una de los más ambiciosas del mundo". Presupuestada inicialmente en 30.000 millones (hace tres años se falló el concurso de ideas), acabará costando el triple, 90.000. "Se pensó en una ampliación de lo que ya había, y de ahí se fue evolucionando", explica el arquitecto Lamela.

La nueva terminal será la primera en la que los pasajeros de vuelos comunitarios y los procedentes de los países de la Unión Europea que han firmado el tratado de Schengen -Alemania, Austria, Bélgica, España, Francia, Grecia, Holanda, Italia, Luxemburgo, Portugal, Dinamarca, Suecia y Finlandia- no se cruzarán en ningún momento, aunque unos suban y otros bajen del mismo avión. Se logrará mediante un innovador sistema de salas estancas, denominadas pasillos flexibles. La nueva terminal ampliará en 28 pasarelas la principal y contará con 37 mangueras de embarque. Su construcción se adjudicó en abril pasado a la unión temporal de empresas en la que figuran ACS y Ferrovial.

Hay prevista ya una futura ampliación con un edificio satélite que tendrá 279.440 metros cuadrados y 26 puertas de embarque y que costará casi 50.000 millones.

Los pasajeros podrán desplazarse por la terminal hasta sus puertas de embarque a través de un pequeño tren sin conductor que recorrerá más de 5,5 kilómetros de vías.

Lo que más afecta es lo que sucede más cerca. Para no perderte nada, suscríbete.
Suscríbete

El actual sistema de recogida de viajeros quedará obsoleto. Ahora, los aviones se colocan, según su destino o procedencia, en una de las tres terminales existentes: en la T-3, los vuelos nacionales; en la T-2, los europeos de los países firmantes del tratado de Schengen, y en la T-1, los vuelos internacionales extracomunitarios. Esto conlleva importantes pérdidas de tiempo tanto en el embarque y desembarque de pasajeros en un mismo avión como en el traslado de aeronaves de una terminal a otra.

El futuro sistema revoluciona el actual y gana tiempo porque elimina todos estos cambios de ubicación y de espera en las salas de embarque. Con una única terminal se pueden llevar a cabo todos estos movimientos sin que los pasajeros se mezclen entre sí. Para ello se construirán tres niveles diferenciados dentro de las pasarelas de embarque. En el nivel 1 se situarán los viajeros de los países del tratado de Schengen; en el 2, los del resto de los países comunitarios y de terceros países, y en el 3, los extracomunitarios que salen del avión. Conforme avancen unos y otros, los departamentos donde se encuentren se irán cerrando.

Regístrate gratis para seguir leyendo

Si tienes cuenta en EL PAÍS, puedes utilizarla para identificarte
_

Archivado En

Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
Recomendaciones EL PAÍS
_
_