La concejal de Obras promueve el túnel entre la Castellana y la N-II

La concejal de Obras de Madrid, Elena Utrilla, propondrá el próximo lunes a la comisión municipal la aprobación del concurso de proyecto y obra para enlazar mediante un túnel, que discurrirá por la calle de María de Molina, el paseo de la Castellana y la carretera de Barcelona (N-II). La obra está presupuestada en 7.000 millones de pesetas y su periodo de ejecución previsto es de 20 meses. Los técnicos de Obras y Circulación han solicitado a los concursantes que resuelvan algunos problemas de accesos al futuro túnel.

Kilómetro y medio

El túnel de María de Molina era una vieja aspiración del alcalde, José María Álvarez del Manzano (PP). El proyecto se había quedado empantanado en su último mandato por culpa de la falta de dinero y otras obras que se desarrollaron en la ciudad. El paso inferior intentará solucionar los embotellamientos que se producen en dos puntos fatídicos para el tráfico de la capital: la confluencia entre María de Molina y Velázquez y la de María de Molina, Francisco Silvela y el arranque de la carretera de Barcelona.

El túnel será de salida, es decir, en dirección oeste-este, y funcionará como el paso inferior de O'Donnell: servirá para evacuar de forma rápida los coches que abandonen la ciudad.

Las empresas que se enfrenten a este paso inferior deberán encarar un problema técnico de envergadura, ya que por esa zona confluyen cuatro líneas de metro: la 9 (Herrera Oria-Puerta de Arganda), la 4 (Parque de Santa María-Argüelles), la 7 (Las Musas-Pitis) y la Circular. Para salvar este escollo han contado con la colaboración de los técnicos regionales que han llevado a cabo la ampliación del metro. "Nosotros ya lo tuvimos en cuenta porque estuvimos en contacto con los ingenieros municipales y hemos dejado lo que denominamos un telescopio, es decir, un hueco entre las líneas para que discurra el túnel. Hay dos opciones: que discurra por debajo de la línea 9 o que vaya entre la 6 y la 4", aseguró ayer un técnico regional.

En el pliego de condiciones se primará también, además de las condiciones técnicas y del precio, la oferta que menos moleste a los conductores, esto es, que menos carriles corte.

Cuando el paso inferior esté completamente terminado medirá casi un kilómetro y medio, desde la Castellana a la carretera de Barcelona. El nuevo paso inferior se unirá a otros dos ya existentes: el que salva por debajo la calle de Serrano y el de la calle de Cartagena. Además, en los pliegos de condiciones se especifica que deberá existir un ramal del túnel en la calle de Velázquez, con lo que quedará solucionada, desde el punto de vista de la circulación, la esquina que forman Velázquez y María de Molina, frecuentemente atascada. Los técnicos municipales calculan que por este ramal entrarán el 40% o el 50% de los coches que utilicen el túnel. Las obras durarán, según el pliego, 18 meses, con lo que, contando el plazo de licitación, el túnel estará listo para su inauguración, en la primavera de 2002. El Ayuntamiento también aspira, mediante esta obra, a que desde el túnel de Cartagena se pueda acceder a la zona del Parque de Avenidas, giro que actualmente es imposible. Los pagos, según establece el pliego de condiciones que se aprobará en el pleno municipal de julio, se efectuarán en tres partidas, correspondientes a los presupuestos de los años 2001, 2002 y 2003.