Los joyeros cierran cinco horas en protesta por los atracos
El 98% de los joyeros de todas las comunidades, excepto el País Vasco, Cantabria y Baleares, según datos de la Asociación Española de Joyeros, Plateros y Relojeros, secundaron ayer un cierre de cinco horas -entre las doce y las cinco de la tarde- convocado para protestar por la oleada de atracos que sufre el sector. Los robos han causado en los últimos cinco años pérdidas de casi 13.500 millones de pesetas al sector, formado por unos 19.000 profesionales en toda España, según estas fuentes. La directora de la asociación, Giovanna Tagliavía, afirmó que la movilización demuestra, "por primera vez en la historia del colectivo, que ha habido una voluntad unánime para pedir soluciones a las instituciones". Tagliavía detalló que fueron 17.621 los profesionales de comercios, mayoristas, talleres y fabricantes que secundaron el paro en todo el país, excepto en Cantabria, País Vasco y Baleares, donde no se sumaron a la protesta.
Ahora continuarán, según la directora, las gestiones emprendidas para solucionar los problemas de inseguridad. El seguimiento, aseguró, fue del 100% en Andalucía, Castilla-La Mancha, La Rioja, Galicia, Extremadura y Aragón, del 98% en Cataluña y Castilla y León y del 95% en Asturias, Madrid, Comunidad Valenciana y Murcia. En Navarra se situó en torno al 90%, al igual que en Canarias.
Pérdidas
Los joyeros, plateros y relojeros se sumaron masivamente al cierre en Castilla y León, región donde los robos supusieron pérdidas de más de 113 millones de pesetas en 1999. Así lo señaló el vicepresidente de la Federación de Joyeros, Orfebres y Relojeros de Castilla y León (Fejorcale), Jesús Arroyo, quien destacó la incidencia del paro en una comunidad en el que coincidió con movilizaciones en contra de la liberalización de horarios comerciales. En Andalucía, según el secretario general de la Federación Andaluza de Joyeros, Mariano Soler, la práctica totalidad de los 3.600 establecimientos secundaron el paro.En Madrid, según el secretario del gremio, Armando Rodríguez, el porcentaje estimado de cierre se situó en torno al 95% , aunque, dijo, "evidentemente no tiene la repercusión que tiene el cierre de las farmacias". Para Rodríguez, el cierre tuvo la misión de "recordatorio" del anterior cese de actividad, en noviembre de 1999. En su criterio, las soluciones deben llegar por las vías jurídica y política.
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