EE UU quiere proteger la confidencialidad en la Red

El Gobierno estadounidense anunció ayer que permitirá la exportación de sistemas de criptografía a usuarios de la Unión Europea, y propuso al Congreso iniciativas que garanticen la confidencialidad de las comunicaciones en Internet. "El Gobierno ya ha actuado para liberalizar los controles de exportación sobre los sistemas de criptografía y permite que más compañías exporten esa tecnología a más usuarios finales", declaró ayer el jefe de gabinete de la Casa Blanca, John Podesta.Los sistemas de criptografía se emplean para proteger la información personal o empresarial, y la Unión Europea ha jugado un papel clave en el rechazo a las restricciones sobre esa tecnología. Ya en octubre de 1997, la Comisión Europea emitió un informe que criticaba a Estados Unidos porque mantenía esas restricciones.

El jefe del gabinete de la Casa Blanca explicó sus planes: "Al tiempo que mantenemos un marco necesario para la protección de nuestra seguridad nacional, hemos abreviado el trámite para la exportación de estos sistemas de criptografía a ciertos países". El funcionario estadounidense explicó que "las nuevas oportunidades y los problemas nuevos" que presenta el crecimiento acelerado de las comunicaciones por Internet para la protección de los derechos individuales y, al mismo tiempo, para la acción policial necesaria en relación con el terrorismo, el fraude fiscal, el tráfico de drogas y las transacciones financieras.

"Hay ahora más de 50 millones de hogares conectados a Internet", dijo. "Porque estamos tan interconectados hay más gente que tiene un acceso más fácil a nuestra información más personal, desde los balances bancarios a nuestro historial médico". Podesta reconoció que "los traficantes internacionales de drogas pueden comunicarse con mensajes por computadora", y que los piratas informáticos "pueden destruir la propiedad cibernética deshaciendo las páginas de Internet o manipulando maliciosamente la información confidencial".

Por ello, añadió, se necesitan nuevas leyes que protejan la confidencialidad y autoricen la intervención policial en las comunicaciones por cable de televisión.