Las obras en una pista de Barajas trasladarán el ruido a Coslada

Las obras de pavimentación de la pista de aterrizaje 15-33 del aeropuerto de Barajas, que se llevarán a cabo durante las noches del 2 al 25 de agosto, obligarán a desviar los aviones sobre el casco urbano de Coslada, según informó ayer Juan Granados, alcalde de esa localidad. Granados se mostró agradecido de que el aeropuerto haya concentrado las obras durante el periodo vacacional para reducir las molestias a los vecinos.

La obras destinadas a "recrecer" (pavimentar), según las definió ayer un portavoz de AENA, la pista 15-33 de Barajas trasladarán el ruido nocturno al municipio de Coslada, cuyos habitantes pasarán las calurosas noches de agosto oyendo el sobrevuelo de los aviones. Pero el perjuicio podría haber sido peor, según AENA. "En las conversaciones con el director del aeropuerto, José Manuel Hesse, llegamos al acuerdo de buscar la mejor solución para los ciudadanos de Coslada", afirmó ayer Juan Granados. "Agosto, al ser un periodo vacacional, se mostraba como la mejor alternativa para evitar al máximo las molestias que producirá el vuelo de las aeronaves sobre la ciudad", añadió.

Según el Ayuntamiento cosladeño, mientras esté cerrada la pista preferente de aterrizajes, "las aproximaciones de configuración norte se producirán por la cabecera 36R y, por tanto, sobrevolarán el casco urbano de Coslada". "Igualmente, en caso de que el viento obligue a tener configuración sur, los despegues tendrían que hacerse por la cabecera 18L, afectando, asimismo, al municipio", añadió el Consistorio.

"A lo largo de este año hemos tenido varios avisos del aeropuerto para anunciarnos desvíos temporales de vuelos", explicó Granados, "y nos alegra saber que con estas obras no se producirán desvíos en los próximos meses".

El regidor de Coslada agradeció también a Hesse que "haya seleccionado esta alternativa, que es más cara pero garantiza un menor plazo de ejecución y unas menores molestias a los vecinos". "José Manuel Hesse se ha comprometido conmigo", indicó Granados a Efe, "a intentar acortar el plazo de ejecución de obras en lo posible, y me ha comunicado que tras las reparaciones se apostará claramente por no utilizar la pista 18L-36R, lo que garantiza una menor afección de las operaciones sobre Coslada".

El aeropuerto de Barajas lleva a cabo unas 1.000 operaciones cada día, de las que poco más de 20 se realizan durante el horario nocturno. Los aviones más ruidosos tienen prohibido, además, operar de noche.