Los candidatos se pagan la campaña

Los militantes ayudan a costear los gastos de hotel y restaurante de Díez, Bono, Fernández y Rodríguez Zapatero

Los candidatos a la Secretaría General del PSOE pagan la campaña de su propio bolsillo. El aparato se ofreció al principio a poner a su disposición los medios necesarios para que explicaran sus proyectos a la militancia "en igualdad de condiciones". Hubo marcha atrás inmediatamente. Ni una sola peseta. De este modo, Rosa Díez, José Luis Rodríguez Zapatero, Matilde Fernández y José Bono terminarán la campaña con sus cuentas bancaria adelgazadas en centenares de miles de pesetas.Algunos colaboradores alivian su carga adelantándose a pagar taxis, almuerzos y cenas. También la hospitalidad de los socialistas de las localidades que visitan se deja sentir, y en muchos casos, sobre todo en esta última etapa, hay almuerzos organizados y habitaciones de hotel que ya han sido abonadas por ellos cuando los candidatos piden la factura.

La situación, inédita en el PSOE, de contar con cuatro candidatos originó al principio no pocas confusiones y malos entendidos. Las primarias entre Joaquín Almunia y José Borrell contaron con el apoyo técnico y económico del aparato del PSOE. Ahora, la Comisión Política sólo abre las puertas de la sede federal para las ruedas de prensa de los aspirantes a la Secretaría General. También facilitan el correo con los delegados.

La primera en darse cuenta de que no iba a haber financiación fue Rosa Díez, al inaugurar el pasado 4 de mayo la lista de candidatos. Su equipo entendió que podía instalarse en la calle Ferraz, en Madrid, sede federal del PSOE, y que desde allí se le iban a facilitar los desplazamientos a las sedes de las organizaciones provinciales. Pero las crecientes peticiones de despachos y dinero por parte de militantes de base que aspiraban a ser también candidatos empujó a la decisión final: "Nada a nadie".

"Con un teléfono y un ordenador nos arreglamos", dijo animosa una colaboradora de Rosa Díez. Enseguida un militante puso a disposición de esta candidata una pequeña oficina en Madrid, para que su jefe de campaña, Luis Atienza, organizara viajes y contactos. Desde entonces sólo le resultan gratis los viajes en avión, debido a su condición de eurodiputada.

También el diputado José Luis Rodríguez Zapatero vuela sin pagar con su carné de diputado. Los desplazamientos por carretera empezó haciéndolos solo, en su vehículo, aunque tiene anotados varios viajes en autobús de línea regular recorriendo Castilla hasta llegar a su casa en León. En los últimos días un amigo le hace de conductor. El alojamiento en hoteles corre por su cuenta, y no se queja. Sus colaboradores aseguran que más o menos es lo que viene gastando habitualmente cuando está en Madrid, donde pernocta en hoteles durante todo el año, entre lunes y jueves, para cumplir con su trabajo de diputado.

Los cuatro candidatos suelen asistir a comidas organizadas por los aparatos provinciales, que asumen el pago de la factura. Los actos se celebran habitualmente en las sedes del partido, y en los últimos tiempos, si hay que alquilar una sala de un hotel porque se prevé una afluencia de público imposible de albergar en el partido, la cuenta es abonada por el aparato provincial del PSOE. Desde el primer momento, la UGT y la Federación Socialista Madrileña han puesto a disposición de los candidatos sus instalaciones. "José Luis pagó ayer los bocadillos de jamón que comimos a las tres de la mañana en un bar de carretera", comentaba el viernes el diputado Antonio Cuevas, del grupo de Rodríguez Zapatero, antes de aclarar que "cada vez le toca a uno, o si no, a escote".

También va a escote Matilde Fernández, cuyo equipo configuró la página web y abonó las 25.000 pesetas que cuesta el dominio. La candidata guerrista, concejal del Ayuntamiento de Madrid, paga sus viajes y, habitualmente, los delegados de distintas provincias le preparan comidas y cenas de trabajo. Aunque sea de madrugada, suele volver a Madrid todas las noches, por lo que en hoteles gasta poco.

Otro tanto hace el presidente de la Junta de Castilla-La Mancha, José Bono, quien regresa a su domicilio a altas horas de la noche después de los actos públicos, que suele compaginar con los institucionales. Si por la mañana se reúne en Barcelona con el presidente de la Generalitat de Cataluña, Jordi Pujol, nada le impide a continuación dedicar unas horas a sus compañeros de partido. Si celebra un almuerzo con empresarios o pronuncia una conferencia como presidente de Castilla-La Mancha, termina la jornada en una Casa del Pueblo, donde no consume más que café y agua.

Todos coinciden en señalar que quizá un par de meses más de campaña les produciría algún quebranto pero que, de momento, estos extras son asumibles. Para tranquilidad de todos, incluido un hijo de Rosa Díez, quien prefirió tomarse a broma el dispendio y le reprochó: "Mamá, no has consultado a tus herederos".