El Consell recurre la paralización de la carretera Cabanes-Oropesa

La Consejería de Obras Públicas, Urbanismo y Transportes (COPUT) recurrió ayer el auto de paralización parcial de las obras de la carretera Oropesa-Cabanes, decretado por el juez a petición del fiscal que vio un presunto delito ecológico en el hecho de que el vial atraviese parte del paraje natural del Desert de Les Palmes. El Consell considera que las obras ya habían sido detenidas por iniciativa propia en el tramo polémico.Mientras, el Grupo para el Estudio y la Conservación de Espacios Naturales (GECEN) presentó ayer una querella contra el director general de Obras Públicas, Pedro Marco, y contra el Jefe de la oficina del Plan de Carreteras, también de la COPUT, Josep Llin, como presuntos autores de un delito ecológico. Marco fue quien firmó el escrito en el que se niega que el trazado afecte al paraje natural, pese a que los propios planos así lo indican, y Llin fue, según GECEN, quien afirmó que no había alternativas.

En su escrito, GECEN solicita al juez que, "para la comprobación de los hechos es necesaria la práctica de varias diligencias", como la declaración a ambos imputados. Además, los ecologistas mantienen que un perito medioambiental debería determinar los daños ocasionados y solicitan también la intervención de otro perito hidrológico para que realice un estudio exhaustivo de la hidrología de las cuevas del entorno, en especial del Ullal de Miravet, donde existe una fauna cavernícola única en el mundo.