Ocho personas mueren aplastadas por la multitud en un concierto de rock en Dinamarca

Ocho personas murieron aplastadas en la madrugada de ayer en un concierto de rock en la localidad danesa de Roskilde cuando una multitud trataba de acercarse al escenario durante la actuación del grupo estadounidense Pearl Jam, según informó ayer la policía. Otras 26 personas necesitaron hospitalización y una de ellas se hallaba en estado muy grave. El lugar del desastre se encontraba embarrado y llovía. El primer ministro danés, Poul Nyrup Rasmussen, lamentó profundamente "este accidente terrible y trágico".La policía danesa informó ayer de que había identificado a cinco de las ocho víctimas mortales: dos jóvenes daneses, un sueco, un alemán y un holandés. Según su versión de lo sucedido, una multitud, hasta 50.000 personas según algunos testigos, empujó hacia adelante de forma incontrolable, aplastando a quienes se encontraban en las primeras filas contra el escenario al aire libre. El Festival de Música de Roskilde, a 35 kilómetros de Copenhague, es el más antiguo de los que se celebran en los países nórdicos. Nació en 1971 a la sombra del de Woodstock y ésta es su trigésima edición.

En un comunicado, el grupo Pearl Jam calificó de "horrible pesadilla" el suceso e hizo saber que todos sus miembros se hallaban consternados por las muertes.

"No hay palabras para expresar nuestra angustia por los padres y personas queridas de esas vidas que se han perdido", aseguraba el texto de la banda, colocado en la página web de Sony Music.

"No está claro aún lo que sucedió, pero pareció tratarse de algo fortuito e increíblemente rápido... No tiene sentido", añade el grupo en su comunicado de condolencia.

De acuerdo con algunos de los asistentes, los componentes del grupo pidieron varias veces a la audiencia que se alejaran del escenario para evitar su aplastamiento antes de que ocurriera el desastre.

El director del festival, Leif Skov, recordó que "las condiciones de seguridad eran igual de estrictas que en el pasado y que varias grandes orquestas habían actuado ya en el mismo escenario sin que se produjeran incidentes".

El siguiente concierto previsto tras la actuación de Pearl Jam fue cancelado por los organizadores para mostrar su respeto por los fallecidos. Pero el festival continuó en otros escenarios durante toda la noche, según informa ayer en su página web el diario Jyllands-Posten.

En la mañana de ayer, los hechos de la madrugada se dejaban sentir en el lugar del festival, ensombrecido por un cielo gris y lluvioso. Aun así, estaba previsto que se reanudaran las actuaciones porque "la vida debe continuar", según Marcus, un asistente, afectado pero "decidido a seguir el programa hasta el final".