Las ONG afirman que se pagan más de 200.000 pesetas por llegar a Lorca
La Guardia Civil de Lorca detuvo ayer en Lorca (Murcia) a María Esperanza D.A., de 28 años, esposa del conductor de la furgoneta interceptada en Mijas con 37 inmigrantes hacinados en su interior. Ella alquiló el vehículo a una empresa de Murcia. Los agentes la interrogaron durante casi dos horas y la dejaron en libertad, aunque hoy deberá comparecer ante el juez. La detenida admitió que alquiló la furgoneta a petición de su marido, quien le dijo que "para ganar un dinero fácil, iba a trasladar unos aparatos de música hasta Cádiz". La investigación se centra ahora en otros individuos de Lorca. El destino de los inmigrantes era presumiblemente Ramonete, una pequeña población lorquina.Sindicatos y ONG de Lorca vienen denunciando con insistencia la existencia de mafias que extorsionan a los inmigrantes desde que cruzan el Estrecho. Para el responsable de una de estas organizaciones, que prefiere guardar el anonimato, las supuestas redes funcionan como "agencias de viajes". "Sabemos que los inmigrantes pagan más de 200.000 pesetas por llegar a Lorca...".