La Sindicatura de Cuentas promete acelerar las auditorías de la Generalitat

La Sindicatura de Cuentas, encargada de fiscalizar las cuentas de la Generalitat, entregará al Parlament con más rapidez en adelante sus informes de auditoría. Así lo prometió ayer el síndico mayor, Ferran Termes, que prometió reducir en seis meses la actual demora en la entrega de sus auditorías. La Sindicatura de Cuentas entregó ayer con 515 días de retraso la auditoría de las cuentas de 1997.

Termes hizo la promesa de acelerar la entrega de las auditorías después de haber dado las cuentas de 1997 de los departamentos de la Generalitat y de sus organismos dependientes al presidente del Parlament, Joan Rigol. Los informes de la Sindicatura de Cuentas son un elemento de control que se repiten todos los años desde la creación del organismo en 1984.Los informes pasaron ayer por el registro del Parlament. A partir del lunes estarán en manos de los grupos parlamentarios.

El síndico mayor admitió que ha existido un "poco de retraso" a la hora de finalizar y entregar este informe, retraso que justificó porque la Sindicatura recibe otros encargos del Parlament, agregó: "Todo lo que nos piden no lo podemos hacer. Tienen que ver qué escogen". Desde hace unos añoss la Sindicatura ha asumido también la revisión de las cuentas de los ayuntamientos catalanes. Medios de este organismo señalan que esta tarea supone una carga de trabajo adicional.

Con todo, Termes afirmó que el retraso en la entrega de las cuentas es "normal y lógico", y puso como ejemplo que hasta el próximo 30 de junio no recibirá el informe presentado por la Generalitat correspondiente al ejercicio de 1999, de forma que la Sindicatura no podrá entregar las cuentas de la Generalitat hasta el año 2001. "Queremos reducir este retraso en unos seis meses; ésta es nuestra intención", señaló Termes.

El síndico mayor no quiso desvelar si ha encontrado anomalias en las cuentas de 1997, porque cree que primero lo tienen que saber los diputados.Añadió que su departamento "no puede entrar a fondo en las cuentas, sino mirar si cuadran las cifras y si están bien presentadas".

Sobre el informe que la sindicatura prepara sobre los fondos para formación de parados a raíz de las anomalías descubiertas en los últimos meses, Termes afirmó: "Ya hemos empezado a trabajar". El síndico mayor no precisó cuándo estará listo este informe porque "depende de lo que se encuentre, de lo que se vea y de lo que se mire. Puede ser muy fácil o muy difícil, ya lo veremos sobre la marcha", añadió.

La Sindicatura de Cuentas vive un momento de provisionalidad desde las pasadas elecciones. Deben renovarse tres de sus siete puestos, incluido el del propio síndico mayor.

Cuatro de los siete síndicos han sido escogidos a propuesta de Convergència i Unió (CiU). Tras las elecciones autonómicas del pasado otoño, CiU ha perdido escaños en el Parlament, y ERC quiere que la coalición le ceda un puesto en esta institución. La reorganización de la sindicatura puede aplazarse hasta otoño, indican fuentes de este organismo.