Leioa acoge el Festival de Teatro de Calle de Humor ø Los artistas españoles destacan en la oferta musical ø José Sacristán protagoniza 'Amadeus' en el Teatro Gayarre de Pamplona
ESCENARIOS
Las risas del teatro se apoderan ahora de la calle
Los focos de un teatro pueden llegar a agobiar a los actores que intervienen en la trama subidos a su escenario. Sin embargo, más puede castigar un sol esplendoroso cayendo de plano sobre las cabezas de esos mismos intérpretes o un chaparrón impenitente, dos riesgos a los que se exponen cuantos participan, tanto público como actores, en el Festival de Teatro de Humor de Leioa, una muestra que da pie a que las calles del municipio vizcaíno sean invadidas por el revuelo y las ocurrencias que, desde ayer, despliegan las 16 compañías que intervienen. La mayoría de las actuaciones se desarrollarán al aire libre y se podrán disfrutar de forma gratuita, aunque el programa cuenta con dos platos fuertes para cuyo disfrute habrá que desembolsar 1.200 pesetas en el polideportivo Sakoneta: Entiéndeme tú a mí, presentado por el Club de los XXI con el humorista Eloy Arenas como protagonista y el presentado por el grupo catalán Chapertons Comic bajo el título de Boom.
Aunque no será Leioa la única localidad que brinde la oportunidad de reírse contemplando un montaje teatral, ya que el Teatro Principal de San Sebastián acoge este fin de semana el original desfile de personajes que propone el humorista veneciano Ennio Marchetto en su última ocurrencia, un espectáculo en el que, apoyado en coloristas trajes de papel y recursos de mimo, da vida a 45 personajes célebres entre los que se encuentran Elvis Presley, Fidel Castro y Frank Sinatra.
Humorístico es también el trasfondo de las siete historias "cómicosexuales" que componen Por una manzana, el último montaje de Curro Danzateatro. Siete fragmentos independientes que parodiarán en Deusto las relaciones sexuales que se dan en la sociedad moderna, desde los contactos en prensa hasta el sadomasoquismo.
Y también resonarán carcajadas en el Teatro Amaia de Irún, donde la compañía Txalo, la misma que lleva representando más de 500 funciones de su adaptación de La ratonera, de Agatha Christie, pondrá en escena otra adaptación. En este caso, los actores dirigidos por Ramón Barea recrean, en euskera y castellano, una obra del autor francés Jacques Rampal, La dama y el cardenal, en la cual escenifican el reencuentro del cardenal Alceste con una de sus amantes, Celimene, en cuya apacible vida irrumpe tras 20 años de distanciamiento.
Mientras, el Teatro Gayarre de Pamplona acoge mañana Amadeus, obra cuyo reparto está encabezado por el conocido actor José Sacristán, quien interpreta al compositor Antonio Salieri. La obra gira precisamente en torno a la recapitulación que Salieri hace de su tensa relación con Wolfgang Amadeus Mozart en la corte de José II de Austria, lo que da pie a reflejar la degeneración reinante en la época y a escuchar una buena batería de piezas de Mozart de la voz de una veintena de cantantes.
En cuanto a la oferta musical, tras un mes plagado de artistas foráneos, cabe resaltar que junio arranca cediendo el protagonismo a los españoles. Algunos de ellos son veteranos en la escena, como Los Suaves y María Dolores Pradera, que ofrecerán sendos espectáculos dirigidos, en principio, a públicos bien distintos. El de la cantante madrileña buscará acomodo en las butacas del Teatro Barakaldo para disfrutar con el renovado repertorio de la ex actriz, que paradójicamente incluye piezas popularizadas recientemente entre los más jóvenes, como Hijo de la luna, El talismán y Sevilla tiene un color especial.
También corearán las canciones que escupan los bafles quienes acudan a Bergara y Puente La Reina a ver y a escuchar a Los Suaves, aunque los gustos de los seguidores del cuarteto gallego se decantan más por las guitarras propias del rock urbano. Este estilo prevalece en su décimo elepé, Víspera de todos los santos.
También son aficionados al rock, aunque a una vertiente más moderada, los fans de Tahúres Zurdos, que mostrarán en Getxo una propuesta basada en una instrumentación rockera, influencias del pop y en la arrolladora personalidad de Aurora Beltrán. Esta cantante y guitarrista navarra está considerada una de las tías más duras del rock español, pese a haber cedido a las proposiciones de las compañías multinacionales.
Ésa es una de sus diferencias con el armonicista madrileño Ñaco Goñi, que publica sus discos con sellos independientes. Éstos son los que más empeño ponen en apoyar el blues y el boogie que gusta de interpretar en sus sudorosas actuaciones, como a buen seguro hará mañana en Bergara.
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