Noguera cree que Domínguez quiso facilitar la venta del balneario público Las Arenas

El grupo socialista endureció ayer las críticas sobre la gestión del concejal de Urbanismo del Ayuntamiento de Valencia, Miguel Domínguez. La portavoz socialista, Ana Noguera, y el edil Rafael Rubio acusaron ayer a Domínguez de permitir que empresas privadas especulen con el uso del balnerario Las Arenas, de titularidad pública, y participar en "una maquinación para alterar el precio de las cosas". Noguera calificó de "oscuras" las operaciones realizadas por Comunidad de Bienes Las Arenas, que aglutina a las empresas concesionarias del balneario, y la mercantil Beniluz, arrendataria del citado grupo empresarial y encargada del montaje estival de discotecas al aire libre en el interior del recinto pese a la prohibición realizada por el Ayuntamiento de Valencia. El PSPV instó a Domínguez a que explique por qué, desde 1995, concede licencia a Beniluz para instalar discotecas en el balneario y con qué criterio se estimó el valor del inmueble, a través de la empresa municipal AUMSA, en 605 millones de pesetas para pactar su venta a los arrendatarios en un documento de 1998. Los ediles socialistas informaron de la existencia de un contrato previo entre la comunidad de bienes concesionaria y la mercantil Beniluz en el que ya se recogen las condiciones de venta que iban a pactar con el Consistorio. "Domínguez no ha sido ajeno a esta operación, y sospechamos de una posible connivencia entre él y las empresas concesionarias", señaló Noguera, quien dijo que Domínguez "ha aceptado también modificar el planeamiento del barrio para que la prolongación de la avenida Blasco Ibáñez no atraviese el balneario". El popular Alfonso Grau indicó que las acusaciones carecen del más mínimo rigor y dijo que si se vende el balneario se hará dentro de la más estricta legalidad.