Familiares y amigos ensalzan en un homenaje a López de Lacalle su "compromiso con la libertad"

El cementerio de Andoain congregó ayer a varios cientos de personas junto a los restos mortales de José Luis López de Lacalle, el columnista y miembro fundador del Foro Ermua asesinado el 7 de mayo por ETA. Familiares, amigos y allegados le rindieron un homenaje en el que recordaron su "lucha contra el franquismo" y su "compromiso con la libertad". El escultor Agustín Ibarrola, que no pudo asistir en el Bosque pintado de Oma a un acto de desagravio organizado por Gesto por la Paz, dijo que el Foro Ermua "está amenazado por los terroristas con la colaboración de los nacionalistas".

El homenaje a López de Lacalle fue un grito contra la violencia y en defensa de la libertad. Familiares y amigos del columnista ensalzaron su figura y reivindicaron el fin de la violencia. Al cementerio de Andoain (Guipúzcoa) acudieron la viuda del fallecido, Mari Paz Artolazabal, y su hijo Alain, junto a otros familiares, además de muchos representantes de la cultura, la política y el sindicalismo.Dos ramos de rosas y una gran fotografía de López de Lacalle presidieron este acto cívico en el que el librero Ignacio Latierro indicó a las autoridades que "están obligadas a solucionar al problema de la paz". El escritor Raúl Guerra depositó sobre la tumba un ejemplar de Descalzo sobre la tierra, de Francesc Escribano, como "metáfora de la lucha por la libertad". En el homenaje estuvieron varios representantes socialistas y algún dirigente del PP, así como Marcelino Camacho y Nicolás Sartorius, ex compañero de cárcel de Lacalle durante el franquismo. El escultor Agustín Ibarrola afirmó que en Euskadi no se vive "una guerra entre nacionalistas y no nacionalistas, sino entre fascismo y democracia". Dijo también que el Foro Ermua "está terriblemente amenazado por los terroristas con la colaboración de los nacionalistas".

Ibarrola se ausentó de un acto organizado a la misma hora por Gesto por la Paz en su apoyo tras el ataque de los simpatizantes de ETA contra su obra el Bosque pintado de Oma, en Kortezubi (Vizcaya). Los pacifistas -que describieron a Ibarrola como un "amante de la libertad que pagó con años de cárcel su compromiso con ella"- plantaron dos retoños de pino en solidaridad con el artista, quien ha visto cómo han dañado unos 100 de los 500 árboles pintados.

Por otra parte, autoridades alavesas colocaron flores en la tumba del ertzaina Jorge Díez, asesinado junto al socialista Fernando Buesa, antes de un pleno de las Juntas Generales de Álava que celebraron en San Vicente de Arana, localidad natal del agente.