Plata anuncia un plan para diseñar un reparto social del agua esta legislatura

El regadío ocupó un espacio central en el discurso que realizó ayer el consejero de Agricultura, Paulino Plata, en su primera comparecencia parlamentaria de la legislatura. El consejero se comprometió a elaborar un Plan de Optimización del Agua de Uso Agrícola para "avanzar en su reparto social" en situaciones de sequía. La oposición criticó, por insuficientes, las partidas presupuestarias dedicadas a la modernización del regadío y coincidió en reprochar a Plata el retraso en la elaboración de las leyes de Pesca y Agricultura.

El consejero de Agricultura se remitió a las cifras para recalcar la importancia del regadío en la producción final agraria andaluza: "Ocupa apenas un 20% del territorio y genera más del 50% del empleo y la producción". Plata, quien hizo continua referencia a la necesidad de modernizar las explotaciones agrarias, indicó que en esta legislatura se seguirán usando las ayudas previstas en el Plan Andaluz de Regadíos, que subvenciona la mejora de las instalaciones para evitar las pérdidas de agua. "El agua es un factor estratégico", afirmó Plata, quien exigió "un tratamiento digno" al regadío andaluz en el Plan Nacional de Regadío y en el Plan Hidrológico Nacional, que aún debe aprobar el Gobierno central. Con su propuesta para avanzar "en el reparto social" del agua, el consejero ampara las exigencias de algunas asociaciones agrarias (UPA, COAG), que habían pedido que se garantizara el suministro a las explotaciones familiares y a los cultivos que más jornales generaran en épocas de carestía. "El Plan Andaluz de Regadíos es insuficiente presupuestariamente", respondió Ricardo Tarno, portavoz de Agricultura del PP, quien aseguró que "a este ritmo, la modernización de los regadíos no se terminará hasta dentro de 70 años".

OCM del aceite

El consejero de Agricultura subrayó el potencial del campo andaluz en relación al resto del Estado -"aquí, el 15% de la población ocupada pertenece al sector agrario, frente al 8% en España"-, y admitió "la dependencia" de la financiación comunitaria, que supone un 25% de la renta de los agricultores de la región. Plata aseguró que su departamento "hará un seguimiento permanente" de las reformas en las ayudas que establezca la Comisión Europea en los próximos años. Y anticipó que ante la próxima reforma de la Organización Común de Mercado (OCM) del aceite de oliva, la Junta pedirá la modificación del actual sistema de ayudas. "Tiene que reflejar la capacidad productiva de nuestro país y hay que volver a establecer un precio de intervención", dijo Plata.

La oposición saludó la nueva disposición de diálogo entre Plata y el nuevo ministro de Agricultura, Miguel Arias Cañete, pero criticó el retraso en los dos principales proyectos legislativos de la Consejería: la ley de Pesca (que estará lista a principios de 2001, según Plata) y de la ley de Agricultura. Tarno reprochó el escaso consenso logrado en torno al Plan de Modernización de la Agricultura, mientras que José Cabrero, de IU, emplazó al consejero a establecer "mecanismos que permitan el acceso a la tierra" de los jornaleros y exigió una política de igualdad efectiva.