Izquierda Unida y andalucistas se niegan a participar en el debate sobre el estado de Cádiz

,La polémica convocatoria del pleno extraordinario sobre el estado de la ciudad marcó ayer el desarrollo de la sesión en el Ayuntamiento de Cádiz. Los grupos de IU y PA se negaron a participar en el debate porque, según denunciaron, el gobierno local, del PP, convirtió el pleno en "una pantomima y un paripé" tras imponer su mayoría absoluta y mostrar un talante "autoritario". La alcaldesa, Teófila Martínez, rechazó las acusaciones que la tildaron de "antidemocrática" y recordó que el PSOE, durante los 16 años de mandato municipal, tan sólo permitió este debate en una ocasión. Por el contrario, Martínez defendió que ella se había sometido a cuatro en sus cinco años de alcaldesa.

El grupo municipal Socialista-progresista se demarcó del resto de la oposición y fue el único que debatió con el PP sobre la ciudad. El anuncio de los portavoces de IU y del PA de no participar descafeinó un pleno, que fue convocado el jueves por el PP, justo 48 horas antes de su celebración, que es el plazo mínimo que establece la ley. La oposición denunció esta circunstancia y que el pleno coincidiese con otras dos sesiones extraordinarias para ratificar el convenio laboral de los funcionarios y la aprobación definitiva de los presupuestos municipales.

El portavoz andalucista, Julio Braña, acusó a Martínez de intentar "neutralizar" a la oposición e ironizó sobre sus varios cargos políticos. "Supongo que no quedaría otra fecha libre en la agenda de nuestra pluriempleada alcaldesa, quien sólo puede dedicar a la ciudad de Cádiz y a debatir cómo se encuentra las breves horas de ocio que le permiten sus múltiples cargos", lamentó Braña.

En parecidos términos críticos se expresó el portavoz de IU, Jesús Gargallo: "Creemos sinceramente que el PP no tiene ninguna intención de debatir sobre el estado de al ciudad. Convoca este pleno porque se lo fuerza el reglamento orgánico. No le interesa despertar al pueblo de Cádiz de la hipnosis al que lo tiene sometido. No le interesa saber cuáles son los problemas de fondo y tan sólo quiere mantener la burbuja con los proyectos positivos".

A todas estas críticas se sumó la portavoz socialista, María de la O Jiménez: "El PP está alimentando vicios antidemocráticos en un cultivo permanente de autoritarismo". Jiménez, pese a todo, sí participó en el debate con el grupo popular sobre la evolución de la ciudad.

Jiménez denunció que el PP ha perdido la "última" oportunidad que tenía Cádiz para equilibrar su oferta urbanística con las actuaciones de los terrenos ociosos de Astilleros y los antiguos cuarteles de Varela. "En vez de planificar correctamente, han troceado la ciudad y la han vendido al mejor postor", lamentó Jiménez. La concejal enumeró el paro, la infravivienda, el transporte y la "insuficiente" oferta cultural como los principales problemas de Cádiz.

Martínez realizó un diagnóstico radicalmente opuesto. "Todo nuestro trabajo está orientado a crear una ciudad moderna y sin límites. Con mucho esfuerzo, lo estamos consiguiendo y el mejor ejemplo son los 4.000 parados menos que hay en Cádiz desde que gobierna el PP en la ciudad", espetó.

Presupuestos

El Ayuntamiento de Cádiz rechazó, con los únicos votos del PP, las alegaciones presentadas por IU a los presupuestos municipales para este ejercicio. La federación de izquierdas denunció una "flagrante desproporción" entre los capítulos de ingresos y de gastos. El documento cifra unos ingresos de 14.733 millones de pesetas y 13.541 millones en gastos.

Los presupuestos locales, que incluyen un plan de saneamiento, dependen de los Gobiernos andaluz y central, que tendrán que destinar partidas específicas para corregir el déficit estructural que padece la capital gaditana debido a su insularidad y a su imposibilidad de crecimiento urbanístico y empresarial.