'EL CAMINO' DE SHIRLEY MacLAINE

Shirley MacLaine vuelve a las andadas. En la mejor tradición californiana de explorar a fondo cualquier vía espiritual, de la reencarnación al budismo, la actriz, con más de medio centenar de películas a sus espaldas y todos los reconocimientos posibles en las vitrinas de su casa, acaba de presentar en las librerías norteamericanas su experiencia como peregrina del Camino de Santiago. MacLaine, con una larga tradición de divagaciones místicas recogidas en varios libros, se hizo entre el 4 de junio y el 3 de julio de 1994, con 60 años, los 900 kilómetros que separan Roncesvalles de Santiago, siguiendo -dice en The Camino. A journey of the spirit (El Camino. Un viaje del espíritu)- la sugerencia de dos cartas de desconocidos que le animaban a vivir la experiencia. Quien busque en El Camino una interpretación de la religión, la historia o el arte que emanan de la primera gran vía de la cultura europea debe buscar en otro sitio. El libro lo constituyen más de 300 páginas de yo-mí-me-conmigo y se inicia con una explicación de por qué decidió no llevar sujetador y cómo, cuando hizo una prueba de peregrinaje cerca de casa, cargada con una mochila, la falta de esa prenda íntima atrajo la atención de un extraño, católico, feo, maloliente y de origen español, que le propuso: "¿Puedo hacerte el amor?". Naturalmente, la aprendiza de peregrina rechazó el plato que se le ofrecía. "Fue como una visión de experiencia", un adelanto de lo que también ocurriría más adelante. Pero para visiones en El Camino, la de Shirley reencarnada en gitana amante de Carlomagno en el siglo VIII, y el emperador de Occidente convertido en Olof Palme en el XX. La actriz/escritora ha estado durante la primera mitad de este mes promocionando su libro y contando su experiencia por múltiples foros de Internet. -