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La A-68 invierte 15,3 millones de euros en instalar fibra óptica en su trazado

La Vasco Aragonesa instalará cerca de 50 videocámaras de vigilancia

Vasco Aragonesa, la empresa concesionaria de la autopista A-68, se ha metido de lleno en las nuevas tecnologías de telecomunicaciones. Con una inversión de entre 2.500 y 2.600 millones de pesetas (15,3 y 15,6 millones de euros) está instalando a lo largo de todo su trazado (Bilbao-Zaragoza) fibra óptica. La firma de la prórroga en 15 años en la concesión de la autopista el pasado febrero, hasta el año 2026, ha servido para que los responsables de Vasco Aragonesa, presidida por José Alberto Pradera, se lanzaran a la mejora de sus sistemas de comunicación interna, información y vigilancia. La autopista contaba con un cableado de cobre de hace 20 años que era insuficiente para las actuales necesidades de la vía de comunicación, de acuerdo con el director de instalaciones, Enrique del Olmo.Las obras de instalación de la fibra de vidrio se han iniciado este mes y se culminarán a lo largo de este año. En todo caso, el montante total de la inversión, que se reparte entre este ejercicio y el próximo, incluye los sistemas de vigilancia de circulación y de información a los usuarios de la autopista.

La aventura de la fibra óptica de la Autopista Vasco Aragonesa se inició con la petición al Ministerio de Fomento de una licencia. La Administración, en su respuesta positiva, recomendaba la instalación de un cableado más ancho que permitiera prestar servicios a operadores independientes. En otras palabras, alquilar la red. Así el nuevo cableado va a tener un uso interno, de vigilancia e información, y otro externo.

La nueva red va a permitir a la A-68 la instalación de cerca de 50 videocámaras de vigilancia en los puntos más conflictivos del vial: las entradas y salidas y las zonas de mayor conflictividad y congestión. El tramo que va de la frontera entre Álava y Vizcaya hasta Zambrana y las Conchas de Haro, ambos con una alta viabilidad invernal, contarán con cámaras cada dos kilómetros y medio. Estas cámaras irán asociadas a dispositivos de detección automática de incidencias que disparan una alarma y permiten verificar y conocer los problemas de la circulación casi cuando se producen.

Junto a las cámaras, y de forma que la información tenga una utilidad práctica, se instalarán seis nuevos paneles de información al usuario cerca de los escapes de la autopista, para que los conductores puedan tomar decisiones sobre la conveniencia o no de continuar en ruta.

La tercera pata de este cambio en las comunicaciones de la Autopista Vasco Aragonesa es una renovación de la red de radio en las unidades móviles que permita sustituir los sistemas de comunicación por telefonía móvil, que se saturan en caso de problemas invernales.La nueva red de comunicación quiere instalar un sistema por satélite que permita utilizar la fibra óptica. Este sistema es la parte de la inversión que se deja pendiente hasta el ejercicio próximo.

"Cuando solicitamos al Ministerio de Fomento la licencia de instalación de cable nos recomendaron que instalaramos capacidad excedente para poder dar servicios a los operadores que lo pidan. Lo hemos hecho, pese a que el fin fundamental es el servicio propio", señala el director de instalaciones, Enrique del Olmo.

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Telefonía

Así, la empresa piensa ahora que puede prestar servicios a compañías de telefonía local y en concreto a Euskaltel. Vasco Aragonesa ya ha hablado con esta firma para saber cuáles son los puntos en los que le gustaría contar con salidas a poblaciones. Este contacto no se ha formalizado en ningún acuerdo real. Es tan solo una previsión de la autopista de cara a dar mayores posibilidades de uso a la fibra que ahora instala. "Tenemos una relación puntual", señala Del Olmo.

Entre los planes de la concesionaria de la A-68 están también pelear por incrementar los sistemas de información al usuario de este vial. Así, quieren contar con una frecuencia de radio, "en la parte más alta del dial", que les permita dar una información permanente a los conductores. Este proyecto precisa de un cambio en la normativa, una posibilidad que también están demandando otras concesionarias de autopistas españolas. La idea no es competir con las cadenas tradicionales, sino emitir música y boletines informativos sobre el estado de la ruta. Este modelo ya existe en autopistas francesas e italianas.

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