Los alcaldes del PSE en la Margen Izquierda critican la política de inversiones

Los alcaldes socialistas de la Margen Izquierda volvieron ayer a criticar la falta de inversiones en infraestructuras en su comarca. En la segunda reunión del frente común formado el pasado mes para lograr una mayor atención del Gobierno vasco y la Diputación vizcaína, insistieron en la necesidad de construir el eje del Ballonti, la nueva autovía prevista para la Margen Izquierda.Esta carretera tiene detallada la inversión necesaria, que ascenderá a 10.524 millones de pesetas (ver EL PAÍS del 30 de abril), pero aún no tiene fecha de inicio ni financiación.

El primer edil de Santurtzi, Javier Cruz, dijo ayer que es una "absoluta prioridad en la Margen Izquierda y Zona Minera" con el fin de que el "tráfico de vehículos pesados tenga otra alternativa que por donde pasan todos los vecinos de la Margen Izquierda". Ahora el tránsito de vehículos se concentra en la autopista A-8.

Los alcaldes socialistas mostraron su "rotundo desacuerdo" con el plan de inversiones para sus municipios. "Hemos demostrado con creces nuestra responsabilidad, nuestra colaboración, nuestra paciencia con el Gobierno vasco y con la Diputación, pero es imposible esperar más", señalaron.

Túnel del Serantes

Los ediles avanzaron su intención de solicitar una reunión con el nuevo ministro de Fomento, Francisco Álvarez Cascos, sobre el proyecto del túnel del Serantes, que proporcionará un acceso ferroviario directo de las mercancías al Puerto de Bilbao. El Gobierno central, tras dos años de estudios sobre esta cuestión, se decantó a finales de 1999 por el trazado más caro, presupuestado en 9.500 millones de pesetas, y cuya aprobación definitiva estaba pendiente del visto bueno del Ministerio de Medio Ambiente.

La construcción de esta infraestructura es una reivindicación urgente de las autoridades vizcaínas, aunque su desarrollo ha avanzado con lentitud y aún no hay plazos fijos para el inicio de las obras, fundamentales para el desarrollo del Puerto bilbaíno.

Los alcaldes incidieron en la necesidad de mayores inversiones en la zona: "Estamos en una situación de orfandad y abandono y por eso reclamamos una ayuda interinstitucional para abordar el desarrollo de infraestructuras viarias y ferroviarias".

Además, pidieron la adopción de medidas innovadoras que permitan la atracción de inversiones para nuevos proyectos industriales y una regeneración medioambiental, ya que su comarca soporta el mayor número de terrenos contaminados "y, por lo tanto, de más difícil salida en el mercado industrial", indicaron.

Los alcaldes también criticaron el Plan Euskadi 2000-2003 del Gobierno vasco, que recoge unas inversiones de 120.000 millones de pesetas, de los que sólo una pequeña parte se destinará a la Margen Izquierda y Zona Minera, en concreto, a la Línea 2 del Metro y al polígono industrial de El Campillo.