Feria en Tarragona y romería en Girona

Tarragona también celebra su Feria de Abril. Los andaluces de Girona, sin embargo, optan por una romería. La mayoría de los representantes de entidades andaluzas en las comarcas de Girona admiten que la excesiva politización por parte de organizadores y corporaciones locales, así como las ínfimas ayudas institucionales, dificultan enormemente la puesta en marcha de acontecimientos de este tipo.Las entidades dispuestas a organizarlos mantienen que el signo político del partido al frente del Ayuntamiento acostumbra a ser determinante. En general, los consistorios socialistas dan mayores facilidades, mientras que los de CiU o ERC son más reacios, aunque en ocasiones la regla se rompe en función de los gustos y antipatías del propio alcalde hacia la cultura andaluza. Otras veces son las propias entidades andaluzas quienes marean la perdiz y magnifican una negativa con fundamento a la cesión de unos terrenos o una migrada subvención e intentan convertirla en una ofensa a la población de origen andaluz para meter presión sobre un Ayuntamiento.

Sorteando estas y otras dificultades, la Coordinadora de Entidades Culturales Andaluzas de las Comarcas de Girona ha organizado para el próximo 18 de junio una romería provincial en Olot que confía poder reunir a unas 10.000 personas. Rafael Blanco, profesor de baile y miembro de la Asociación Cultural Andaluza de Olot que organiza el acto, asegura que su entidad tiene prácticamente confirmado que el discurso de las autoridades que seguirá a la misa rociera cantada y a la ofrenda correrá a cargo del presidente de la Generalitat, Jordi Pujol. Aunque inmediatamente añade, por esa necesidad de guardar equilibrios políticos, que se intentará que venga también "algún socialista fuertecillo", para no hacerle un feo al consistorio de Olot, que está en manos del PSC. La romería, que contará con diversos grupos de baile, dos paradas de feria y una exhibición ecuestre, es el acontecimiento más destacado que las entidades de Girona han conseguido organizar conjuntamente durante este año, dejando a un lado la tradicional participación de las entidades en las fiestas patronales de cada localidad. Las entidades andaluzas han hablado a menudo de buscar un lugar fijo para una celebración más duradera, pero la diversidad geográfica de las casas andaluzas que forman la coordinadora aconsejan la itinerancia, aspecto que complica la organización y obliga a negociaciones constantes.

Los problemas de relación entre algunas entidades y el excesivo afán de lucro que guía a ciertos organizadores de fiestas andaluzas es otro de los problemas que impiden la consolidación de una Feria de Abril en las comarcas de Girona. José Morano, miembro del Centro de Andalucía de Girona y fundador de diversas entidades parecidas en Cataluña, asegura que son pocos los que se mueven para promocionar la cultura y el folclor andaluz. "Son mayoría los que lo hacen para ponerse cinco duros en el bolsillo", añade. Morano asegura que la cultura asociativa se está esfumando rápidamente y recuerda que hace sólo cinco años el Centro de Andalucía llegó a superar los 200 socios, mientras que en febrero de este año no llegaba a la treintena. Las escasas subvenciones institucionales no ayudan a remontar la situación. "Te piden 20 papeles para conseguir 40.000 pesetas que sólo te sirven para pagar la merienda de los nenes que actúan en los grupos de baile", bromea Antonio Banco.

En las comarcas de Tarragona la Feria de Abril tiene dos polos tradicionales: la ciudad de Tarragona, en los denominados "barris de Llevant", donde ya cumple una década ininterrumpida, y la comarca del Baix Penedès, en la población de Cunit. A lo largo de la semana pasada se constituyeron nueve casetas en el barrio de Bonavista, de la capital, donde se celebra también uno de los mercados dominicales mayores de Europa. Por primera vez el Ayuntamiento de Tarragona se ha implicado directamente en el apoyo económico de estos festejos de gran tradición entre los barrios de Llevant, a lo que se comprometió el año pasado.

La feria ha tenido un gran éxito de público -más de 20.000 personas ha visitado el real- y los feriantes se han gastado cerca de cuatro millones de pesetas, aunque ésta es sólo la mitad de la inversión total de los festejos de la feria, por lo que la asociación de vecinos ha conseguido el compromiso directo del alcalde para cubrir el resto. El año pasado, por poner un ejemplo, se recuperaron 1,2 millones de pesetas en alquiler de casetas.