El obispo de Cádiz critica con dureza la situación del mercado laboral

El obispo de Cádiz, Antonio Ceballos, ha renovado su discurso de rechazo frontal a las condiciones del mercado laboral. En la víspera de la celebración del Primero de Mayo, Día de los Trabajadores, el prelado firma una carta pastoral en la que considera "arriesgado creer que todo va bien porque la economía marcha bien" y en la que advierte de que "una economía concentrada y globalizada no garantiza (...) la redistribución del bienestar". En su misiva a los fieles, Ceballos aporta datos sobre la precariedad laboral, el desempleo en la provincia de Cádiz, el número de familias que solicitan el salario social o la discriminación de las mujeres. Añade el obispo su pesar por la falta de perspectivas de muchos jóvenes y por el trato que reciben los inmigrantes.

Respecto a la contratación temporal, se pregunta si no existen empresarios "que se refugian en los contratos eventuales, disfrazando la contratación de trabajadores con menor empleo de lo que el servicio requiere y propiciando el fraude". También se refiere a "aquellos empresarios sin escrúpulos que, en un alarde cruel de economía sumergida, se aprovechan de la situación de necesidad de los parados para escamotear la regulación de las relaciones laborales".: