"No quiero darle razones al PP para que diga que estamos por la confrontación"

Manuel Chaves, presidente de la Junta de Andalucía, afronta su cuarta legislatura convencido de que el PP se va a fijar como meta ganar las elecciones en Andalucía y asegura que no le dará razones para que le acusen de buscar los enfrentamientos.P. En su discurso de investidura usted subrayó su oferta de diálogo, ¿eso significa que el Gobierno va dejar el papel político al partido?

R. Yo no pretendo un Gobierno única y exclusivamente gestor. Lo que pretendo es que el Gobierno sea valorado por su gestión política en la solución de los problemas que tienen los andaluces y por su capacidad de negociación con el Gobierno de la nación, y que sea el partido el que desarrolle una acción política neta, estricta y nítida.

P. ¿Ése ha sido el perfil que ha buscado a la hora de nombrar a los consejeros?

R. Ha sido una razón. Depende sobre todo de la estrategia política que desarrollemos. Ya la tenemos fijada: hacer una apuesta muy fuerte por la negociación. Pero lo que no quiero es darle ninguna razón al PP de Andalucía para que pueda decir que estamos por la confrontación. En España se abre una situación política determinada: el PP tiene mayoría absoluta a nivel nacional, tiene neutralizada a Convergència i Unió y creo que puede ganar en el País Vasco. Por lo tanto la reflexión que pueda estar haciendo el Partido Popular es que sólo les queda Andalucía para ganar en toda España.

P. ¿Como si fuera Andalucía territorio comanche?

R. No utilizaría esa expresión, sino como un territorio que les queda por ganar. Creo que van a fijar como objetivo Andalucía. El problema es cómo lo logran y tienen dos opciones: o abren un proceso de negociación con la Junta de Andalucía, que ellos pueden intentar rentabilizar para solucionar los problemas de la comunidad; o pueden entender que el enfrentamiento con la Junta es más rentable, porque eso les puede permitir acusar a la Junta de esterilidad y de que pierde dinero al bloquearla económicamente. Éstas son las dos opciones que tiene el PP. Yo voy a hacer todo el esfuerzo para que se decante por la primera.

P. En su partido se inclinan más por la segunda opción, la de la asfixia económica.

R. No lo sé. Hay que esperar. Si el Gobierno se inclina por la misma política que la de los últimos cuatro años se va a volver a equivocar, y ahí están los resultados electorales. A pesar de lo que dice el PP de Andalucía, si hay bloqueo, nos van seguir dando buenas bazas políticas frente al Ejecutivo de la nación. Lo que sí tengo claro es que se va a producir una desactivación del proceso de desarrollo autonómico. Creo que ellos van a elaborar un discurso de las autonomías como instituciones despilfarradoras, que ímplicitamente contribuyen a la disgregación y van a contraponer ese discurso a otro de una España moderna que funciona mejor de una manera centralizada, trasladando a la opinión pública que las autonomías son órganos de descentralización administrativa y no, de descentralización política. Me parece que en ese discurso van a utilizar a los ayuntamientos frente a las comunidades autónomas.

P. ¿Esa reflexión fue la que le llevó a insistir más en su investidura en la España plural que en la Andalucía reivindicativa?

R. Creo que lo urgente y necesario ahora es que se tiene que celebrar el debate sobre el estado de las autonomías en el Senado, que no se convoca desde 1997. No sólo para hablar de temas como la reforma del Senado, sino para poner en claro el proyecto que tiene el señor Aznar. Yo creo que quiere vender el discurso de la España central frente a las autonomías, que le ha sido rentable a corto plazo.

P. Pero, ¿por qué incidió más en la España plural que en la Andalucía autónoma?

R. Porque desde fuera y, cada vez más, nos otorgan un papel importante, significativo, decisivo a la hora de la estructuración del Estado, de la España plural.

P. La oferta que hizo al PP en el Parlamento no tuvo respuesta, ¿se esperaba el silencio?

R. La presidenta del PP llevaba escrito el discurso inicial y la réplica antes de haberme escuchado. Su intervención inicial no tenía nada que ver con lo que yo dije en la investidura, ni su réplica con la contestación que le dí. Fue a su aire, a otra cosa. Entró en cosas menudas, pero en los grandes problemas que afectan a Andalucía no quiso pronunciarse.

P. Aznar se ha marcado como objetivo el pleno empleo, ¿esa meta es alcanzable en Andalucía en esta legislatura?

R. Fijar el objetivo del pleno empleo es plausible, pero debemos ser serios y rigurosos. Si se me está hablando de que con un porcenteje del 9% o el 10% de paro se está alcanzando el pleno empleo entonces sí es posible, creando medio millón de empleos cada año; ahora bien, si se está hablando como objetivo el dejar el paro en un 3% o un 4% pues entonces creo que se está engañando miserablemente a la opinión pública. ¿Cuántos puestos de trabajo se tienen que crear en cuatro años para que la tasa de desempleo se quede en un 3% o 4 %? ¿Entre cuatro y cinco millones de puestos de trabajo? ¿eso es alcanzable? Creo que es posible rebajar el paro, pero lo que no se puede es engañar a la opinión pública. Y yo no la voy a engañar.

P. ¿Qué grado de compromiso hay con el Consejo Audiovisual de Andalucía? Cultura ha creado un organismo con el mismo nombre.

R. Está claro que vamos a crear un Consejo Audiovisual que no tiene absolutamente nada que ver con ése, que no respondía a lo que viene en el programa electoral. El consejo estará formado por gente independiente, tendrá carácter consultivo, de seguimiento e, incluso, de vigilancia de los contenidos no sólo en las televisiones públicas, sino también en las privadas.

P. ¿El hecho de que José Bono fuera el único presidente autonómico del PSOE que acudió a su toma de posesión tiene alguna significación?

R. No. Por decirlo de una manera muy simple: estaba tan ocupado en el Gobierno que no me dio tiempo a invitar personalmente a todo el mundo a que vinieran. Con Pepe Bono tengo una especial consideración. Estuve en su presentación como candidato y él quiso corresponderme. ¿Que él pueda tener otro objetivo? Me parece legítimo también.

P. ¿Cree que hay grupos interesados en abrir el debate sobre su sucesión?

R. Si los hay, yo no los conozco. Soy secretario general del partido y no los he detectado. Me parece que ese tipo de cosas es más bien producto de incontinencia verbal que de otra cosa. Si hay ese grupo, que creo que no existe, que estuviera pensando en algún movimiento sucesorio sobre la base de que yo me voy a ir a la secretaría federal del PSOE a Madrid, entonces se equivocan de pé a pá. Cometen un error.