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Metro, autobuses y trenes de cercanías tendrán tarifa única en enero de 2001

FCC y Alsthom construirán el tanvía del Baix Llobregat

El metro, los autobuses, los trenes de cercanías de Renfe y los de la Generalitat tendrán una tarifa integrada a partir del próximo 1 de enero. Esto significa que el usuario pagará una sola vez y no tendrá que volver a hacerlo cuando efectúe un transbordo. La tarifa estará en relación con la extensión del recorrido. El Consejo de Administración de la Autoridad del Transporte Metropolitano tomó también ayer la decisión de adjudicar el tranvía del Baix Llobregat al consorcio encabezado por Fomento de Construcciones y Alsthom. Las obras empezarán en enero y la línea entrará en servicio el 2003.

El territorio de la región metropolitana se ha dividido, a efectos tarifarios, en seis zonas y cinco sectores y se ha ampliado hasta los límites de Cercanías de Renfe (Vic, El Vendrell y Maçanet) y de los Ferrocarrils de la Generalitat (Manresa e Igualada). Pero hay una limitación: el viajero pagará como máximo seis zonas. Es decir, alguien que partiendo de Vic se dirigiera a El Vendrell cruzaría realmente 11 zonas (teniendo en cuenta que por algunas pasaría dos veces), pero pagaría lo mismo que si fuera sólo a Barcelona.La ampliación del territorio más allá de la región metropolitana estricta comporta que el número de habitantes que potencialmente se beneficiarán de la nueva tarifa ascienda a 4,5 millones. El coste de la operación ha sido calculado en una banda que va de 2.500 a 3.500 millones de pesetas, en el primer año, ya que a partir de ese momento se dispondrá de datos reales sobre incrementos de viajeros que permitan ajustar las tarifas y costes. Este dinero saldrá de una caja de compensación que creará la Autoridad del Transporte Metropolitano (ATM) y que integrará la que ya existía en la Entidad Metropolitana del Transporte (EMT).

Las previsiones de la ATM indican que en 2001 se pueden ganar unos 35 millones de viajeros gracias a la integración tarifaria exclusivamente.

La integración supone un ahorro real para una cantidad notable de usuarios del transporte público y una mejora en las conexiones para el resto ya que hasta ahora algunas líneas, en especial de autobuses, funcionaban sólo desde su origen a destino y en adelante se conectarán con el resto del transporte existente formando una red interconectada de transporte público.

Todos los responsables del transporte público catalán con representación en la ATM (ayuntamientos y Gobierno catalán) expresaron ayer su satisfacción por el acuerdo. Con todo, no dejaron de hacer notar que Renfe no se halla aún totalmente incorporada a la ATM, de forma que hoy mismo habrá que empezar a negociar con la empresa ferroviaria la ampliación del acuerdo tarifario existente.

En estos momentos, el acuerdo se circunscribe a las estaciones comprendidas dentro de la zona uno (véase mapa en la página 8) y la ATM confía en que se extienda al resto del territorio sin problemas, según aseguraron ayer tanto el consejero de Política Territorial, Pere Macias, como el primer teniente de alcalde del Ayuntamiento de Barcelona, Xavier Casas.

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El sistema tarifario permitirá cambiar de cualquier sistema de transporte a otro con algunas limitaciones de tiempo. Por ejemplo, la zona central (zona uno) tendrá un periodo de 75 minutos. Este tiempo no es el equivalente al desplazamiento, sino el que va desde que el usuario marca el billete hasta que vuelve a pasarlo por una máquina en un segundo o tercer cambio. Es decir, una persona que tomara el metro en Santa Coloma y viajara hasta Cornellà empleando 35 minutos dispondría aún de otros 40 minutos para coger un segundo transporte (metro, autobús o ferrocarril) sin tener que volver a pagar.

La ATM no ha fijado aún el tiempo que establecerá para el resto de las zonas ya que está en fase de estudio. En cualquier caso, se trata de no perjudicar con esta limitación al usuario según afirmó el director de la ATM, Xavier Ventura.

Hay dos casos que tendrán un tratamiento especial: el aeropuerto y Montserrat. La ATM busca una solución para estos dos puntos que permita ofrecer un tipo de tarifas a los usuarios habituales y otro a los esporádicos. Para tener derecho a estas tarifas será imprescindible utilizar alguno de los abonos que se pondrán a la venta. El billete sencillo no estará integrado. Sí lo estará la equivalente a la T-1 (tarjeta de 10 viajes) y otras tarjetas con validez para números determinados de viajes o plazos temporales cerrados.

PASA A LA PÁGINA 8

El consorcio encabezado por FCC y Alsthom explotará el tranvía del Baix Llobregat

VIENE DE LA PÁGINA 1 El tranvía que finalmente circule por la Diagonal será de Alsthom. El consorcio formado por esta empresa junto a FCC, Entrecanales y Bansabadell, entre otras empresas, se llevó ayer el gato al agua y logró la concesión de la construcción y explotación de la línea. Una línea que, previamente, quedó podada. La ATM, previa negociación con los ofertantes y los municipios, decidió que el tranvía no llegue hasta Sant Boi ya que esta población quedará conectada a la plaza de Francesc Macià con la prolongación de la línea del Baix Llobregat de los Ferrocarrils de la Generalitat.

La construcción del tranvía supone una inversión de 36.160 millones de pesetas. De ellos, las administraciones públicas harán una aportación inicial de 25.826 millones de pesetas y el resto lo pagarán en un plazo de 25 años, que son los que tiene la concesión.

El tranvía tendrá dos líneas: una que irá hasta Sant Joan Despí pasando por Cornellà, y otra que llegará hasta Sant Feliu de Llobregat cruzando Esplugues y Sant Just Desvern. No obstante, el cruce de Esplugues no se hará por la carretera que discurre frente al Ayuntamiento, atendiendo a una petición del municipio, que temía que con ello quedará estrangulado el tráfico de la ciudad.

La longitud total de la línea será de 16,8 kilómetros, con 35 paradas. Realizarán el servicio 20 unidades cuya longitud será de 33 metros o de 66 metros en las unidades dobles. La capacidad de los vehículos será de 218 plazas, 72 de ellas con asiento, además de espacio para bicicletas o sillas de ruedas. Los tranvías dispondrán de aire acondicionado caliente o frío y su velocidad máxima será de 70 kilómetros por hora, pero la velocidad comercial será de 20 kilómetros. La frecuencia será de 3 minutos 45 segundos en hora punta y de unos 10 minutos en el resto del día.

La tarifa del tranvía será, desde el primer momento, integrada. Esto significa que los usuarios pagarán el mismo precio que en el metro o el autobús y podrán transbordar sin nuevos pagos. La línea ofrecerá conexiones en Cornellà (con la línea 5 del metro y Cercanías); en Sant Feliu, con Renfe y los autobuses interurbanos; en Sant Joan Despí (Renfe) y con las estaciones de la línea 3 de Maria Cristina y Zona Universitaria.

Las previsiones indican que el tranvía transportará unos 19 millones de pasajeros, que pueden convertirse en 21 millones en torno al año 2015. No obstante, sólo siete millones serán, en principio, pasajeros nuevos. El resto serán viajeros captados de otros modos de transporte público existentes en la actualidad.

El pliego de condiciones ofertado por Alsthom no incluye el compromiso de construir los tranvías en España, pero los responsables de la ATM están convencidos de que los vehículos serán construidos en la factoría que la empresa tiene en Santa Perpètua de Mogoda, aspecto que fue confirmado por un portavoz de la firma antes de conocer la decisión que les convertía en ganadores del concurso. La inversión correrá a cargo de la Generalitat (dos tercios) y el Gobierno central (el resto). Los ayuntamientos de la zona se harán cargo del déficit de explotación.

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