Ayuntamiento y Guardia Urbana negocian el fin del conflicto laboral

El Ayuntamiento de Barcelona y la Guardia Urbana reanudarán la próxima semana las negociaciones del convenio colectivo del cuerpo policial. Tras más de tres meses de movilizaciones y protestas de los agentes, las conversaciones con la mayoría de los representantes sindicales se retomarán el jueves. La fiscalía del Tribunal Superior ha decidido abrir diligencias sobre una de las acciones de protesta en las que participó un agente armado.

La iniciativa para reanudar las negociaciones pacifica en parte el conflicto del Ayuntamiento con el cuerpo de la Guardia Urbana, que se abrió antes de Navidad. Una de las condiciones que imponía la Administración para reanudar la discusión sobre el convenio era que los agentes abandonaran las movilizaciones.Finalmente, los sindicatos mayoritarios -la Asociación Sindical de Policías Locales de Cataluña y el Sindicato Profesional de Policías Municipales de España, que representan a casi un 70% de la plantilla- se han mostrado abiertos a ello. CC OO ha rechazado el acuerdo para iniciar las negociaciones y otras representaciones sindicales, como UGT y la Asociación Sindical Independiente, decidirán en los próximos días si se suman a la mesa negociadora del convenio.

Expedientes

Responsables de la gerencia municipal de Vía Pública insistieron ayer en que el Ayuntamiento no había cedido a la pretensión de algunos de los sindicatos que exigían la retirada de los expedientes sancionadores para volver a negociar. "Se han abierto 15 expedientes por baja actividad de agentes", explicaban. Tan sólo uno de ellos ha concluido en sanción, según las mismas fuentes. En el caso de los expedientes abiertos a dos bomberos, uno de ellos ha sido sancionado con dos años y medio de suspensión y el segundo con seis meses.

El momento de mayor crispación del conflicto, que ha tenido consecuencias económicas para los agentes que dejaron de realizar horas extras, se registró el pasado 30 de marzo, cuando un grupo de unos 150 guardias urbanos participaron en una protesta y entraron a la fuerza en la casa consistorial, lo que llevó al Ayuntamiento a abrir diligencias informativas.

La mesa negociadora que emprende las negociaciones el jueves se reunirá un vez a la semana y tratará específicamente de las condiciones de la Guardia Urbana dentro del convenio general del municipio; además constituirá una comisión específica para estudiar la manera en que los agentes deben pasar a la llamada segunda actividad por razones de edad.

Por su parte, el jefe de la sección sindical de CC OO, Pepe García, explicó que no se han sumado al acuerdo porque el Ayuntamiento tiene una actitud "beligerante" contra su sindicato, por lo que mantendrán la convocatoria de sus movilizaciones.

Una de las acciones de protesta concluyó con una bajada de pantalones en la plaza de Sant Jaume y uno de los guardias urbanos que la secundaron llevaba la pistola al cinto. Ese hecho ha motivado que el fiscal jefe del Tribunal Superior, José María Mena, decidiera abrir diligencias para averiguar la identidad del agente. Por la misma razón el Ayuntamiento abrió una investigación interna que, según fuentes municipales, todavía no ha concluido.