SABROSO HOMENAJE

Existen muchas maneras de recorrer la obra de Luis Buñuel en el centenario de su nacimiento. Ver su cine, oír la música de sus películas o adquirir objetos que salen esta temporada a la venta para recordarlo. También el sentido del gusto se ha sumado al homenaje. En el bar Los Amigos del Tubo, de Zaragoza, su propietario, Ricardo Morales, ha rendido su peculiar tributo al cineasta. En su establecimiento, "que debe recordar a este gran aragonés", se pueden degustar las tapas Ese oscuro objeto del deseo -pimientos rellenos de chipirones en su tinta-, Viridiana -un huevo cocido sobre chistorra y dátiles-, El ángel exterminador -alcachofa rellena de atún con alas de calabacín- o Tristana -cebolla asada con farsa de morcilla y rebozada-. El ojo de El perro andaluz -un huevo sobre loncha de jamón con el iris cortado por un pimiento- se tuvo que retirar, pues "no entraba por la vista y la gente se echaba para atrás".-