Prenden fuego en la casa donde vive un supuesto moroso
Los vecinos de un bloque de pisos situado en la calle de Pare Garí de Vilanova i la Geltrú han denunciado ante la policía el acoso que vienen sufriendo en las últimas semanas por parte de unos misteriosos atacantes, empeñados en prender fuego al edificio. La policía cree que el pirómano puede ser alguien a quien uno de los vecinos, un conocido constructor, debe dinero. En dos ocasiones se han registrado incendios provocados con gasolina.El hecho de que simultáneamente hayan aparecido pintadas en el exterior del edificio y en el rellano contra este vecino en particular -donde le acusan de moroso y de mentiroso- refuerza la hipótesis de que se trata de una venganza personal o de un aviso para que pague. Incluso los vecinos, hartos de la situación que padecen, han colgado pancartas en sus balcones donde piden al convecino que pague lo que debe, que se marche del edificio o que al menos no haga ostentación de los lujosos coches que conduce.
El primer incendio provocado tuvo lugar hace dos semanas. Alguien lanzó un cóctel mólotov en el rellano del segundo piso, donde vive el constructor. Las llamas no afectaron el interior de las viviendas, pero provocaron un gran susto. La noche del pasado viernes rociaron la puerta del edificio con gasolina y le prendieron fuego. El vigilante de una obra próxima vio las llamas y a gritos alertó a los residentes.
"Salimos al rellano tapados con pañuelos, ignorando de dónde salía tanto humo", explica un vecino. Como consecuencia de este último ataque, toda la escalera se ha llenado de humo y los daños han sido valorados en un millón de pesetas. También volvieron a aparecer pintadas contra el constructor.
Convencidos los habitantes del edifico de que las cuentas pendientes de su vecino también les afectan a ellos, se han entrevistado con él pidiéndole explicaciones. "Nos ha prometido 40 veces que ha arreglado sus asuntos, pero el acoso contra él continúa y lo padecemos todos", dice el portavoz de los afectados.
"Ni nos atrevemos a dejar a los niños solos en casa, por miedo a que vuelvan a pegar fuego al edificio. Esto parece Kosovo. Algún día saldremos volando", se lamenta una vecina.
La policía ha reforzado las patrullas en la zona, pero ha dicho a los vecinos que no puede mantener una vigilancia constante de agentes sobre el edificio. Además, el hecho de que la presunta víctima tampoco haya interpuesto una denuncia contra alguien concreto dificulta la investigación policial. De momento, el vecino amenazado se halla en paradero desconocido, según han dicho sus familiares próximos.
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