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El ex presidente niega al juez una maquinación para disolver el CMH

El ex presidente del Consell Metropolità de l'Horta (CMH), Jaime García, negó ayer en un juzgado de Massamagrell que urdiera la "maquinación" denunciada por el PSPV para disolver el ente metropolitano, suprimido por el gobierno de la Generalitat tras los comicios municipales y autonómicos celebrados en junio de 1999. Según la denuncia presentada por los socialistas, el actual alcalde de Rafelbunyol demostró claramente su "torcida intención" para "impedir que quienes han ganado en las últimas elecciones se hagan cargo del ente metropolitano".

García rebatió ayer esas afirmaciones. En su comparecencia ante el juez, de alrededor de 90 minutos, el militante del PP explicó que la disolución del ente fue una iniciativa auspiciada por la Consejería de Justicia y Administraciones Públicas y ejecutada tras la aprobación del correspondiente proyecto de ley en las Cortes Valencianas.

El último presidente del ente metropolitano se desvinculó de esa decisión al tiempo que negaba que cualquiera de sus postreras actuaciones se pudiera incardinar en el delito de prevaricación, ilegalidad -tomar una resolución a sabiendas de su injusticia- de la que le acusa el PSPV.

Concretamente, los socialistas imputan a García la, a su juicio, injustificada demora de la celebración de la asamblea que debía elegir al nuevo órgano de gobierno, lo que posibilitó el anteproyecto de disolución del ente metropolitano. El CMH, entre otras competencias, se encargaba de la eliminación de los residuos sólidos de Valencia y su área metropolitana o la gestión del servicio de agua en alta.

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