El Tibidabo será gestionado por la sociedad municipal de aparcamientos

El alcalde de Barcelona, Joan Clos, anunció ayer, al finalizar el pleno del Ayuntamiento, que el consistorio ha encargado la gestión y explotación de las instalaciones del parque de atracciones y el aparcamiento del Tibidabo a SMASSA, la sociedad municipal de aparcamientos. El alcalde justificó la decisión en la necesidad de "gestionar los activos con agilidad" para hacer posible la apertura del Tibidabo en la fecha prevista, el próximo mes de abril, tal como anunció el propio alcalde hace dos semanas.Precisamente cuando anunció la apertura del parque, Clos también dijo que durante esta temporada el Tibidabo seguiría siendo explotado por Patsa y con la plantilla de trabajadores de esa misma sociedad. El anuncio de que SMASSA iba a encagarse de la gestión del parque de forma provisional cogió prácticamente por sorpresa a los grupos de la oposición municipal. Desde las filas convergentes achacaron al alcalde la improvisación de la decisión que fue comunicada a CiU y el PP tan sólo horas antes de celebrarse la sesión plenaria del Ayuntamiento. La oposición insistió, también, en lo peculiar de la decisión, sobre todo porque SMASSA no tiene ningún tipo de experiencia en gestionar y explotar algo como un parque de atracciones. El gobierno municipal alegó que SMASSA es la sociedad municipal más adecuada "por sus estatutos" para gestionar el Tibidabo y poder hacer frente a posibles eventualidades. SMASSA además de tener en cartera los aparcamientos municipales también recauda los ingresos de la grúa y las zonas azules.

Las explicaciones de Clos no contentaron ni al PP ni a CiU, que le recriminaron no haber informado antes del paso que iba a dar. La oposición exigió que el Ayuntamiento convoque un concurso para que empresas del sector presenten sus proyectos para explotar el Tibidabo.

Zona Franca

El grupo de CiU propuso ayer en el pleno triplicar el número de agentes de la Guardia Urbana que patrullan por el barrio de la Marina, en la Zona Franca, como una medida para tranquilizar a los vecinos por la inseguridad de Can Tunis Nou. De paso, CiU aprovechó para echar en cara al Ayuntamiento el haber dejado degradarse la zona de Can Tunis. El regidor del distrito, Pere Alcober, negó las acusaciones de CiU e insistió en que se están impulsando elementos importantes, como la ampliación de la Fira y la reforma de barrios completos, como el Polvorín.

El PP también planteó una moción a propósito de las múltiples zanjas abiertas en Barcelona por obras de canalización. El grupo municipal popular propuso revisar la organización y la coordinación del consistorio, propuesta que tambié fue denegada. Santiago Fisas afirmó que sólo un 4% de las actuaciones están coordinadas y que en la mayoría de los casos muchas zanjas se abren por falta de coordinación entre los servicios municipales.