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El Lazio, único equipo italiano que sigue en torneos europeos

Veinticinco minutos duró la alegría para el Feyenoord: cuando comenzaron los segundos tiempos de su partido (en Marsella frente al Olympique) y el que el Chelsea ganaba por entonces al Lazio, el equipo holandés estaba clasificado. Pero la ilusión le duró poco: los goles de Simone Inzaghi, en el minuto 54, y de Sinisa Mihajlovic, en el 66, dieron vuelta el resultado en Londres, y sentenciaron su eliminación. El Lazio atravesó esta segunda fase de la Liga de Campeones arrastrándose, arañando puntos apenas merecidos y sin convencer a sus seguidores: pero al final lo consiguió. Su victoria de ayer le permite salvar el pellejo a su entrenador, Sven-Goran Eriksson, y al propio fútbol italiano, que estuvo a punto de quedarse, por primera vez en muchos años, sin ningún representante en los cuartos de final de todas las competiciones europeas.El Feyenoord poco hizo al final para llevarse la victoria de Francia, sabiendo que un gol no le valdría de nada. Y eso que tampoco se lo puso difícil el Marsella, un equipo que apenas ha jugado bien al fútbol en esta segunda fase, donde sólo ganó al Chelsea.

El Chelsea-Lazio estuvo dominado desde el principio por la tensión. El equipo londinense -que por segunda vez en su historia, la primera en Europa, presentó una alineación compuesta íntegramente por jugadores extranjeros- ya estaba clasificado, pero una derrota lo dejaba en el segundo puesto del grupo: y eso fue lo que ocurrió; el Lazio jugó mejor en el segundo tiempo, marcó sus goles y consiguió la clasificación, previsible por los nombres y el precio de su plantilla y angustiosa por la manera de conseguirla.

Victoria del Dinamo

Si el Madrid tardó sólo tres minutos en anunciarle al Dinamo -equipo que quedaba eliminado automáticamente con una victoria madridista- que su asalto en Trondheim iba en serio, los ucranios se pusieron a tiro a la media hora de juego. Marcó Kaladze, tras un barullo en el área, en el 34, y desde entonces, hasta el final, la tensión en el grupo C fue de máxima calidad: los dos contendientes, Real Madrid y Dinamo Kiev estaban ganando (y ganaron) sus encuentros frente a Rosenborg y Bayern Munich, respectivamente.

El Dinamo jugó bien, y se impuso sin mayores problemas (2-0) a un Bayern Munich que presentó -asegurada desde la semana pasada la cabeza del grupo- en su alineación a sólo cuatro de sus habituales titulares: Kuffour, Linke, Fink y Salihamidzic. En el minuto 71 aumentó Demetradze, pero el gol de Raúl seguía valiendo, y los ucranios, que siempre rozan la gloria en la Liga de Campeones, tendrán que esperar otro año más.

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