Los chechenos se atribuyen la muerte de otro centenar de rusos

Los guerrilleros chechenos afirmaron ayer haber causado nuevas y cuantiosas bajas a las fuerzas federales, que continúan atacando las posiciones de los independentistas en el sur de Chechenia. Mientras tanto, en Pskov, trascurrió el entierro de la mayoría de los 84 paracaidistas que el 1 de marzo cayeron en combates con los hombres de Shamil Basáyev y Jattab en el desfiladero de Argún.El Centro-Cáucaso, órgano de propaganda e información de los rebeldes, aseguró ayer que en los combates por Komsomólskoye (Saadí-yurt para los chechenos) han perecido más de 60 rusos. Además, los independentistas habrían liquidado a "no menos de 50 paracaidistas" cuando desembarcaban desde 20 helicópteros en las montañas de Surajlam. El hecho se produjo, según los chechenos, anteayer y el ataque rebelde fue dirigido por Baudí Bakúyev. Estas nuevas bajas de los federales no han sido confirmadas todavía, y generalmente Centro-Cáucaso exagera el número de víctimas rusas. Sea como fuere, los rusos han sufrido este mes dos grandes derrotas: la de los paracaidistas de Pskov y la emboscada tendida por los guerrilleros en Grozni el pasado día 2, en la que perecieron 37 soldados de las fuerzas especiales de Interior.

Al entierro de los soldados de Pskov asistió ayer el mariscal Ígor Serguéyev, ministro de Defensa ruso. El presidente en funciones, Vladímir Putin, condecoró a título póstumo a varias decenas de los paracaidistas caídos.

Serguéyev reconoció que los rebeldes todavía oponen resistencia en la zona de las aldeas montañosas de Ulús-kert y Selmentauzen y en Komsomólskoye. Ayer se cumplió el octavo día de combates en este último poblado, defendido a muerte por los hombres del comandante guerrillero Rusán Gueláyev. El mismo Gueláyev, según las últimas informaciones, ha logrado romper el cerco y huir, aunque está herido en una pierna.