La Guardia Civil retira una red de pesca furtiva en la reserva marina de Coma-ruga

Una patrullera de la Guardia Civil retiró ayer una red de un kilómetro de longitud, presuntamente colocada por pescadores furtivos en aguas de Coma-ruga, en la reserva marina Masia Blanca. La red estaba sumergida a una profundidad entre 4 y 10 metros, a unos 200 metros de la costa, y había atrapado pulpos, sepias, lenguados y otro tipo de peces que fueron liberados tras su retirada. El grupo submarinista Sotavent alertó a primera hora del domingo de la presencia de la red. Según fuentes policiales, la red podría haber sido colocada de madrugada por un pescador furtivo que esperaba retirarla por la noche.-