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Mondragón y su comarca registran la mayor subida del valor de los pisos

Mikel Ormazabal

La comarca del Alto Deba, donde se ubican las localidades de Mondragón, Bergara, Oñati, Aretxabaleta y Eskoriatza, ha experimentado el mayor encarecimiento del precio de los pisos en Guipúzcoa, según un estudio realizado por la Diputación de ese territorio, que compara los valores de mercado de enero de 1999 y los de este año. El pequeño municipio de Aretxabaleta (5.995 habitantes), en el límite con Álava, es el que ha registrado la mayor desviación al alza, con subidas de hasta el 54% en una vivienda de 82 metros cuadrados y 15 años de antigüedad que el año pasado valía 12,7 millones de pesetas.En aquellos puntos de Guipúzcoa donde el incremento ha sido menor, éste ha rondado el 15%, mientras que en la mayoría el encarecimiento ha superado con creces el 40% sobre el precio de 1999. El jefe del Servicio de Tributos Locales de la Hacienda de Guipúzcoa, Andrés Gómez, asegura que el comportamiento de los precios "difiere de unos municipios a otros, e incluso hay diferencias en un mismo término municipal". Lo más sorprendente de este estudio es que en las poblaciones costeras, donde el mercado de la vivienda es mucho más caro, la subida no ha sido tan apreciable como en Aretxabaleta o Bergara. Hay un caso extremo en Andoain, donde unas viviendas de reciente construcción en el barrio de Sorabilla han pasado de valer 15,2 millones a 24,4 millones (un 60% más).

Repercusión fiscal y catastral

El fuerte incremento de los precios que experimenta el mercado inmobiliario en Guipúzcoa en tan poco tiempo ha obligado a ajustar estas variaciones a la tabla de valores de comprobación, utensilio fundamental para que la Hacienda foral aplique todos los tributos referidos a los bienes inmuebles. Por ello, la nueva valoración del mercado de la vivienda libre tendrá efectos fiscales inmediatos.

El Impuesto sobre Transmisiones y el de Sucesiones y Donaciones tendrán como valores de referencia las subidas en el precio que se han registrado durante el último año, de tal forma que nadie podrá declarar ante el fisco una cantidad de venta inferior a la que se estipula en el valor de comprobación renovado. Andrés Gómez advierte de que la distancia entre el valor de mercado y el valor de comprobación que utiliza la Diputación "se ha estrechado mucho".

La nueva tabla también afectará a la redacción del catastro, que se encuentra en fase de revisión y no entrará en vigor antes de 2002. En función de los nuevos precios del mercado, la Diputación aprobará durante este año las ponencias de valoración y a continuación calculará los nuevos valores catastrales, que sirven a los Ayuntamientos para cobrar el Impuestos de Bienes Inmuebles (IBI). En 1998 las haciendas locales guipuzcoanas recaudaron por esta vía 10.500 millones de pesetas (63,1 millones de euros), que suponen su fuente de ingresos más importante.

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Sobre la firma

Mikel Ormazabal
Corresponsal de EL PAÍS en el País Vasco, tarea que viene desempeñando durante los últimos 25 años. Se ocupa de la información sobre la actualidad política, económica y cultural vasca. Se licenció en Periodismo por la Universidad de Navarra en 1988. Comenzó su carrera profesional en Radiocadena Española y el diario Deia. Vive en San Sebastián.

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