"Sólo he dado gloria a Colombia"

El ex ciclista colombiano Lucho Herrera, secuestrado el pasado sábado y liberado el domingo por varios guerrilleros, señaló ayer que no se irá de su pueblo natal y que seguirá entrenando a unos 800 niños en una zona del centro de país donde operan rebeldes izquierdistas. "Voy a seguir en Fusagasugá [localidad a 60 kilómetros al suroeste de Bogotá, donde fue capturado por supuestos guerrilleros], a pesar de la situación que se ha presentado, porque aquí tengo mi familia y mis bienes", declaró Herrera. Lucho, de 38 años y ganador de la Vuelta a España, en 1987, así como de varias etapas del Tour de Francia y el Giro de Italia, admitió que en varios municipios de Cundinamarca, donde desarrolla su labor deportiva, operan las Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia (FARC). La policía no ha confirmado quiénes secuestraron al ex ciclista, pero los allegados a Herrera creen que los guerrilleros del frente 42 de las FARC estuvieron detrás del hecho y que decidieron liberarlo al notar la presión de las autoridades, la ciudadanía y los medios informativos de Colombia y el exterior. Herrera abogó por que los deportistas colombianos "sean excluidos del conflicto", pues, dijo, "no hemos hecho más que darle gloria y alegría al país, y lo que tenemos lo hemos conseguido con esfuerzo". "Nosotros no somos ricos, tenemos algunos bienes adquiridos con nuestro trabajo", insistió Herrera.