Rambla dice que las ayudas para I+D se orientarán al desarrollo de la industria

El consejero de Economía, Vicente Rambla, apuntó ayer que el régimen de ayudas para incentivar proyectos de Investigación y Desarrollo en la Comunidad Valenciana por 396.000 millones de pesetas para el periodo 2000-2006, aprobado el martes por la Comisión Europea, se destinará a apoyar aquellos proyectos que persigan un mayor desarrollo tecnológico de la industria valenciana, la transferencia de tecnología y la colaboración entre empresas y centros de investigación. El responsable autonómico de Economía precisó, en declaraciones a Efe, que el plan de ayudas fue solicitado a Bruselas por la Generalitat en julio pasado.La aprobación de este régimen de ayudas "se produce en un momento sumamente oportuno, ya que próximamente se aprobará el Plan Valenciano de Investigación y Desarrollo (PVID) que tiene previsto poner en marcha un amplio número de líneas de actuación", explicó. Rambla añadió que algunas de estas actuaciones serán cofinanciadas con ayudas de los fondos comunitarios que contempla el próximo Programa Operativo de la Comunidad Valenciana 2000-2006 [el instrumento financiero del Plan de Desarrollo Regional (PDR) presentado en Bruselas], que está elaborando la consejería. A través de estas ayudas destinadas a I+D "se pretende incentivar a las empresas, departamentos universitarios, centros de investigación y asociaciones sin ánimo de lucro que apuesten decididamente por desarrollar actividades de investigación", añadió. Rambla precisó que con este régimen de ayudas a I+D, "la Generalitat podrá dar cobertura jurídica a los programas y líneas de ayuda pública destinados a mejorar tanto la dimensión tecnológica de las empresas como el desarrollo de proyectos conjuntos entre centros públicos y empresas privadas".

Las ayudas estarán orientadas, básicamente, a actividades de desarrollo precompetitivo, como son los proyectos de investigación sobre nuevos productos o de mejora e innovación tecnológica. "Se trata de generar conocimientos técnicos a partir de resultados de la investigación industrial que permitan la realización de nuevos productos o sistemas de fabricación, normalmente por centros de investigación (institutos tecnológicos y universidades) y empresas", precisó.

El consejero añadió que una parte de los fondos se dirigirá a difundir los resultados, a través de acciones que demuestren la aplicabilidad de los programas de investigación y desarrollo tecnológico; y otra se orientará a la cooperación con terceros países y organizaciones internacionales, para aprovechar al máximo los resultados.

Bruselas hace hincapié en que la Administración valenciana está obligada a especificar el contenido, programa y destinatarios de aquellos proyectos que superen los 4.160 millones y de aquellos cuyas ayudas rebasen los 830 millones para evitar que "no impliquen ventajas comparativas respecto a empresas que ya son beneficiarias de subvenciones públicas". Además, la UE especifica que un 60% de las ayudas en forma de subvención a fondo perdido serán directas a empresas; un 20% a centros de investigación y entre un 10%, y un 15% a universidades. Ambas consignas europeas obligan a la revisión del borrador del PVID, que contempla a las consejerías como los principales beneficiarios de las ayudas.