El interventor acusa al equipo de Álvarez del Manzano de múltiples anomalías en la gestión

El interventor general del Ayuntamiento de Madrid, Vicente Arnau, principal fiscalizador de la gestión del presupuesto municipal, reconoce en un informe del pasado 10 de febrero que los expedientes de gasto que tramitan los concejales del gobierno de José María Álvarez del Manzano llegan con múltiples irregularidades. Arnau expresa sus quejas al informar de un concurso de limpieza tramitado de urgencia que "resume características y circunstancias que son predicables de la mayor parte de la contratación administrativa del Ayuntamiento y demás entes institucionales y societarios de su ámbito".

Arnau escribe en la página 7 de su informe: "Esta intervención general da cuenta de las irregularidades y notables retrasos que existen con efectos en la contabilidad municipal, al punto de que todavía se están formalizando en la actualidad, y sólo en parte, operaciones de 1998, que reflejan continuadamente insuficiencias presupuestarias y, por consiguiente, un incumplimiento reiterado del principio de presupuesto bruto que obliga a contabilizar íntegramente todos los ingresos y gastos".Esta crítica de Arnau se produce cuando le piden que informe acerca de un concurso urgente que se podía haber previsto con dos años de antelación. En 1997, el Ayuntamiento firmó un convenio con el Canal de Isabel II para cerrar bocas de riego para economizar agua. Esto suponía que el Ayuntamiento debía efectuar el riego mediante camiones cisterna, con las consiguientes inversiones en este capítulo. Dos años más tarde, en noviembre de 1999, el gobierno municipal descubre que "durante los últimos meses la red de bocas de riego de la ciudad ha disminuido de forma alarmante, con los consiguientes problemas higiénico-sanitarios que ello genera", por lo que hay "un problema bastante preocupante y que debe ser resuelto en el más breve plazo posible", según reza el expediente que inicia el jefe del departamento de Limpieza Urbana, con la conformidad del concejal del área, Alberto López Viejo.

De los 83 días naturales en que se tramitó por urgencia este expediente, Intervención apenas dispuso de 12 para estudiarlo. A partir de este hecho, Intervención realiza un duro alegato: "No sólo en este expediente, sino con carácter general, se observa una insuficiente motivación y explicación de las circunstancias que pueden originar el trámite de urgencia. (...) Todas estas actuaciones de Intervención, que continúa teniendo plazas vacantes en su plantilla vigente en 1999, se efectúan entre otras muchas tareas que van creciendo paulatinamente, en unas condiciones de urgencia, por no decir de precipitación, que no han existido para los órganos que han informado anteriormente y que influyen muy sensiblemente sobre la calidad y adecuación del informe, y que se encuentra con muchas irregularidades que, de no subsanarse, constituyen en la práctica responsabilidad única y exclusivamente para la Intervención General, como órgano de control interno".

Rafael Merino, edil socialista, interpreta que el informe del interventor demuestra que "se están haciendo mal las cosas en todos los expedientes", lo que considera "una barbaridad". "Por otro lado", añade, "teníamos razón en nuestras denuncias sobre el modo de operar de la Concejalía de Limpiezas, y en las pegas que poníamos a este expediente, que no está claro que hayan sido eliminadas, y cuya urgencia no obedece a intereses municipales, sino a otros intereses de otro tipo que ignoramos".

Tramitación "chapucera"

Gerardo del Val, concejal de IU, se muestra escéptico con las denuncias del interventor sobre la "chapucera" tramitación de los expedientes: "Después de lo visto en el último pleno, donde el interventor defendió al alcalde como un edil más del PP, hasta el punto de que me llamó fantasma, también intenta cubrir ahora su propia incompetencia". Por su parte, el concejal de Hacienda, Pedro Bujidos (PP), reconoció ayer que muchas veces se presentan expedientes al interventor "con mucha prisa", informa Antonio Jiménez Barca. Lo resumió con una frase: "Al interventor se le achucha demasiado y lo que hay que hacer es dejarlo trabajar bien". Bujidos, no obstante, aseguró que el equipo de gobierno de Álvarez del Manzano "está dispuesto a solucionar eso, porque es perfectamente corregible".

"El viernes pasado, sin ir más lejos, el interventor dijo en la comisión de gobierno que no le daría tiempo a examinar un expediente de Medio Ambiente y el concejal lo retiró". "Lo que tienen que hacer los concejales es planificar con tiempo sus inversiones; un ejemplo es Elena Utrilla, la edil de Obras, que lo planea a años vista", concluyó.