Los masones mediaron entre el PS francés y los separatistas corsos

Fiel al principio "unir lo disperso" que inspira sus actividades, los masones franceses están desplegando sus oficios para ayudar a la solución del caso corso. Aunque los protagonistas de estas iniciativas insisten en que se trata de contribuciones ajenas por entero al Gobierno, la oposición política pone en tela de juicio el compromiso de "no mantener ningún conciliábulo secreto con los terroristas", que el primer ministro Lionel Jospin asumió solemnemente el pasado día 8 ante la Asamblea. Sospechan que la doble afiliación política y masónica del dirigente del Partido Socialista (PS) Serge Jakobowicz es un subterfugio que el Ejecutivo utilizaba para garantizarse una vía de contacto con el terrorismo corso. El 22 de enero, dos semanas antes de las declaraciones del primer ministro, Jakobowicz, miembro del consejo del Gran Oriente, mantuvo una reunión secreta en París con cuatro representantes de los dos principales grupos terroristas que operan en la isla, el FLNC-canal histórico y el FLNC-canal 5 de mayo. La cita se produjo en la sede del Gran Oriente -la primera orden de obediencia francomasónica- y fue auspiciada por el Gran Maestro Simón Giovannaï, que tiene lejanos antecedentes familiares corsos . "Los nacionalistas traían un mensaje que pasar al primer ministro Lionel Jospin, así que les pusimos en contacto con miembros del Partido Socialista", ha explicado el Gran Maestro, después de que el diario La Croix diera noticia de la reunión. A la cita asistió también un capitán de los servicios secretos, que es igualmente Hermano de la orden del Gran Oriente y que acaba de ser trasladado a Guadalupe, el destino promoción que llevaba años reclamando. En los medios masónicos, la filtración se atribuye al ministro de Interior, Jean-Pierre Chevènement, que no se muestra precisamente entusiasmado con la eventual reapertura del proceso autonómico corso.

El mensaje en cuestión, según ha indicado Jakobowicz, delegado nacional del PS para las relaciones con las asociaciones ciudadanas, era que los grupos terroristas corsos apoyan decididamente el actual proceso de reflexión y discusión sobre un eventual desarrollo autonómico de Córcega.