Los partidos apuestan por el ferrocarril
Las políticas de infraestructura en la próxima legislatura autonómica pueden estar caracterizadas por una apuesta por el ferrocarril. La recuperación y el impulso del tren es al menos una voluntad común de todos los partidos, y así se plasma en los programas de las cuatro formaciones con representación en el Parlamento andaluz.Todos además coinciden en la conveniencia de que la Administración autonómica participe en la explotación de los servicios regionales. Las diferencias son sólo de matiz: El PSOE y PA, socios de Gobierno hasta ahora, proponen crear una sociedad mixta con Renfe. El consejero de Obras Públicas, el socialista Francisco Vallejo, va más allá y asegura que si la compañía estatal no está dispuesta, la Junta crearía su propia empresa de ferrocarriles con vistas a la liberalización del transporte por tren que se producirá en los próximos años.
Para el PP la mejor fórmula son convenios puntuales con Renfe para explotar el eje transversal Huelva-Almería, en tanto que IU aboga por la creación de una entidad pública andaluza "que haga del ferrocarril la infraestructura prioritaria para el transporte de viajeros y mercancías". Según la federación, el tren sólo es utilizado para el 10% del transporte de mercancías en Andalucía, cuando la media europea es del 40%. IU Además entiende que hay que mejorar los corredores que conectan Andalucía con otras comunidades como Extremadura.
Socialistas, andalucistas y populares mantienen su apuesta por el AVE Córdoba-Málaga con conexiones a Jaén y Granada, en tanto que IU, para quien estos proyectos son "cosmética" entiende que es suficiente con la velocidad alta y que esta debería llegar también a las líneas regionales. Con todo, la federación ya ha advertido que no pondrá frenos al proyecto de prolongación del AVE a Málaga.
En cuanto a carreteras, el PSOE sostiene que en los últimos cuatro años la Junta ha sido la única Administración que ha mantenido un ritmo inversor constante y que ha cumplido todos sus proyectos en la red principal, en tanto que el Gobierno central sigue teniendo pendientes varios ejes como la autovía Córdoba-Málaga, Granada-Motril o Adra-Nerja.
PSOE y PA también contemplan en sus programas el eje ferroviario Algeciras-San Fernando.
Los socialistas proponen una red de 300 kilómetros de nuevas autovías que incluyen la A-92 Sur (Guadix-Almería), la A-381 (Jerez-Algeciras), el tramo Úbeda-Jaén de la A-95 que se prolongará en el futuro hasta Estepa, El Portil-Punta Umbría, Huelva-Ayamonte y Almería-Roquetas, entre otros. Los socialistas, junto al PA, se comprometen a tramitar a comienzos de la legislatura la Ley de Carreteras y a crear un fondo de conservación.
Los andalucistas entienden que las autovías de interés general pendiente deben ser objeto de tratamiento especial en los acuerdos de financiación autonómica (Granada-Motril, Córdoba-Antequera, Granada-Málaga y San Roque-Estepona) y reclaman las transferencias de todas las carreteras nacionales. El PA propone que la Junta invierta sus fondos propios en comunicaciones internas como el eje Algeciras-Écija o el desdoblamiento entre Ronda y Antequera, y se comprometen a una mejora de la red secundaria.
El PP integra sus propuestas de carreteras en el marco de un nuevo plan director de infraestructuras para el período 2000-2010 pues según su portavoz, Jorge Ramos, el actual 1997-20007 que fue aprobado en noviembre pasado "ya no es válido". La inversión total ascendería a siete billones de pesetas, de los cuales 1,7 correspondería a la Junta, 3,2 al Gobierno central y el resto a otros organismos y sector privado. El plan propone nade menos que 2.000 kilómetros de autovías en 10 años y asegura que el Gobierno ya tiene comprometidos 500 hasta el 2007 -el Estado ha construido en los últimos cuatro años sólo 45 kilómetros de autovías en Andalucía-. Los fondos autonómicos serían para las autovías A-95 (Úbeda-Estepa), Jerez-Los Barrios y Baza-Huércal-Overa.
IU por su parte se desmarca de las autovías pues entiende que "aunque hacen falta más, ya hay suficientes y no es la prioridad", según su portavoz en la materia, Manuel López Calvo. Entre sus objetivos inmediatos sí figura la terminación de la A-92, cuya remodelación lamenta ha detraído fondos para otras actuaciones igualmente precisas que se encuentran paralizadas.
El programa de la federación de izquierda apuesta por consolidar la red secundaria de carreteras y tejer una malla interior que permita a las ciudades medias incorporarse a la red básica de grandes vías.
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