Más que reformas, revolución

Cristina Goikolea, la patrona de esta casa, no es sólo una anfitriona encantadora sino también una gourmet contrastada. Su sana pasión culinaria se ha realizado plenamente en este caprichoso restaurante, de aires provenzales, enclavado en Amurrio, en el que fuera reformatorio de principios de siglo y que ha cumplido ya cinco años de andadura tras su reconversión. El impulso mayor de esta casa se ha producido hace menos de dos años, con la incorporación de un joven cocinero, el vitoriano Diego Guerrero, forjado en los prestigiosos fogones del Goizeko-Kabi. Si ya hace unos meses encandilaba con sus atrevidas creaciones, lo de ahora se antoja insurgente, sin concesión alguna, revolucionario.

Los nuevos platos son tan osados como certeros y descubren una culinaria singular y a la vez gustosa, que de productos sencillos logra virguerías. Es el caso de unos encantadores crujientes de cereales con tomate especiado, berberechos y aceite de carbón. Dos platos de cuchara dignos de ser piropeados: uno frío, el ajo blanco con aceite de trufa y mousse de guisantes, sobre los que reposa un soberbio taco de bacalao y escoltado por crocanti de pistachos y hojas de ficoide glacial; el otro caliente, la aterciopelada crema de coliflor , con hongos, cigala y embriagador aroma de vainilla.

Un plato que cuesta en carta menos de mil pesetas es uno de los mas engatusadores: espárragos verdes a la plancha con verduras sobre una salsa pil pil pletórica de sabor. Un ejercicio de mestizaje con resultado espectacular es el atípico chop suey de rape y almejas con escabeche de verduras (cardo, apio y puerro).

Impecables las chuletillas de lechal con meloso guiso de oreja y trompetas de la muerte adornadas con un crujiente pan de ajo. Postres tan modernos como deliciosos y como muestra el cremoso helado de queso fresco sobre un empapado brioche con salsa tibia de chocolate con su rulo y gelatina de champagne. Bodega adecuada. Servicio cada vez mas profesional. Excelente relación calidad-precio.

Datos prácticos:

Maskuribai 21, edificio El Salvador; Amurrio.

Teléfono: 945 39 33 14.

Tarjetas de crédito: Sí.

Precio medio: 4.000-5.000 pesetas (menú degustación de ocho platos, 4.800 pesetas).

Puntuación: 7 /10.

Cierre: Las noches de lunes a jueves, salvo en verano que cierra lunes y martes por la noche.

Aparcamiento: Sí.