La protesta de Rage Against The Machine contra la delicadeza de Sakamoto e Ismael Lô

La semana se inicia protestona con la actuación de hoy en Leganés de los californianos Rage Against The Machine, un grupo de actitud explícita y comprometida que combina rap, metal-funk y punk-rock de manera extrema. El senegalés Ismael Lô, el japonés Ryuichi Sakamoto y las belgas Laïs ponen, a cambio, el toque exquisito con sus respectivas músicas, cargadas de sugerencias. La protesta llega también con la plataforma cívica madrileña No Nos Resignamos, que, en su empeño de desalojar a la derecha del poder, organiza un concierto para celebrar el pacto de los partidos de izquierda de cara a las elecciones.

- Dureza y compromiso. La batalla de Los Ángeles se traduce el reciente disco de Rage Against The Machine, y es un título más que significativo sobre su actitud como grupo. Los californianos han recuperado la faceta más rebelde del rock, y la han llevado al lado más reivindicativo, alineándose a causas como la de Chiapas, los chicanos en EE UU, el poder negro..., lejos siempre de la mera pose o el panfleto. Ese cóctel de compromiso estalla más con su música cruda, que hacía tiempo no exponían en directo. Tras unos años de ausencia de los escenarios, vuelven con más rabia si cabe y hoy se espera que atronen en La Cubierta de Leganés.Con cierta similitud, pero sin llegar a su contundencia, dos grupos madrileños de reciente formación muestran sus armas esta semana: los alcalaínos Beholder, la esperanza del metal español, que ya han conseguido que una discográfica les fiche, y los capitalinos Scandal Sue, con disco en la calle producido por uno de los artífices del éxito de Dover.

- Sencillez y buen gusto. Ya nadie llama a Ismael Lô el Dylan africano, como cuando hace unos años se dio a conocer con su armónica al cuello, porque ya se ha hecho famoso por méritos propios. La consagración le ha llegado recientemente de la mano de Almodóvar, que ha incluido su dulce canción Tajabone en una de las más sugerentes escenas de la película Todo sobre mi madre, reciente Goya y candidata al oscar. La actuación de Lô, además, se produce en un lugar exquisito, el teatro de La Abadía, que inicia así una programación musical de calidad acorde con las obras que allí se representan. Un día después del senegalés llegarán las voces de Laïs, tres damas belgas que cantan en flamenco. Se han dado a conocer en los circuitos del folk y la música de raíz, pero han traspasado esas fronteras cuando Sting las ha llevado como teloneras en sus recientes conciertos por Francia.

En los ochenta lideró uno de los grupos de música electrónica más influyentes, The Yellow Magic Orchestra, pero nada menos que dos discos viene a defender a Madrid el japonés Ryuichi Sakamoto: por su prestigio como compositor de bandas sonoras (El último emperador, Feliz Navidad, Mr. Lawrence, El pequeño Buda...) Cinemage, un álbum que incluye las más famosas; y por su capacidad como pianista, Back to the Basic, su primer disco de piezas para piano solo.

La sueca afincada en Madrid Carita Boronska completa la partida del buen gusto poniendo su bella voz al servicio del jazz en el Central durante toda la semana.

- Cantautores de ayer y de hoy. Krahe vuelve a con su Dolor de garganta; Pablo Bello, con su nueva personalidad de Nauta, acompañado del guitarrista Antonio Toledo, y se estrena Aurora Guirado, la malagueña que ha conseguido sacar de su retiro a la inefable Pepa Flores, antes conocida como Marisol. Mientras, con el humor por bandera, Pepín Tre se dedica al juego de palabra y a la risa inteligente.

- Pop y rock de aquí. Para los gibraltareños Melón Diesel, el 2000 va a ser su año. Ha dejado de ser una promesa y su segundo disco, que estrenan durante cuatro días en Chesterfield, les ha convertido en una de las realidades más importantes del pop-rock nacional. Algo que no ha conseguido el veterano Dogo y Los Mercenarios, un grupo que desde Sevilla lleva años siendo muy reconocido por la crítica, pero poco por el público. El blues madrileño le debe mucho a Tonky, el músico que, con su banda, lleva años alegrando las noches de la capital. Por la parte más bailable, el pop español se hace funk con Bananafunkoca y Funk Machine. Además, lo nuevo del mundo celta llega de la mano del grupo vigués Blanco, que toca el jueves en un local plagado de músicos profesionales, Ritmo y Compás, una de las salas de ensayos más famosas de Madrid. Hay novedad también en el mundo del rap: la nueva sensación española se llama Violadores del Verso, un grupo que apuesta por la renovación del género.

- Música por el cambio. La plataforma No Nos Resignamos lleva años luchando por conseguir en todas las instituciones gobiernos progresistas. Lo intentaron en las últimas elecciones municipales con una serie de conciertos contra Álvarez del Manzano y ahora se muestran esperanzados tras el acuerdo preelectoral logrado entre el PSOE e IU. Aznar es el problema es el lema bajo el que convocan a los grupos madrileños Buenas Noches Rose, reagrupado para la ocasión, y Clan Club, y a la cantante Olga Manzano. Una fiesta que pretende asegurar el voto progresista para los comicios que vienen.

Además, Jorge Pardo vuelve con su trío por dos noches a Clamores, mientras que los senegaleses afincados en Madrid Djanbutu Thiossane tocan mezclando los ritmos de su tierra y lo aprendido aquí. Para finalizar la semana, en Caracol se presenta Bjorn Again, el grupo que toma su nombre de uno de los componentes de los míticos ABBA, y sobre el que ha recaído buena parte de la reivindicación que del grupo sueco de los setenta se ha hecho en los últimos años.