El PSOE ignora a los socialistas valencianos al apostar por el trazado sur del AVE

La sigilosa actitud mantenida hasta ahora por el PSPV sobre el AVE resultó ayer dinamitada en Alicante por unas contundentes declaraciones de Jesús Caldera, portavoz adjunto del PSOE en el Congreso, en las que afirmó que su partido apostaba claramente por la opción sur o por la integral, la propuesta por el presidente de Castilla-La Mancha, José Bono. Hasta ahora, sólo los líderes socialistas en Valencia y Castellón se habían manifestado abiertamente a favor del trazado norte. Y el PSPV, que considera un error inclinarse ahora por un trazado, calificó la intevención de Caldera como una elección personal.

El Ministerio de Fomento ha apostado claramente por la opción sur, que enlaza directamente Madrid con Albacete y Alicante para penalizar el recorrido a Valencia en casi un 50% de la distancia real (470 kilómetros de vía por 350 en línea recta). Y hasta ahora, los dos partidos con mayor apoyo electoral en la Comunidad Valenciana, PP y PSPV, habían mantenido un discreto silencio sobre los seis trazados del AVE, aunque con un claro sesgo en sus preferencias.Así, el Gobierno del popular Eduardo Zaplana, con su insistente defensa de que los seis trazados cumplían su objetivo, menos de 100 minutos de viaje entre Madrid y Valencia o Alicante, daba un claro apoyo a la opción sur, que sólo con unas velocidades medias ahora imposibles de lograr cumpliría el requisito. Mientras, y aunque los socialistas valencianos y castellonenses han apostado por la opción norte (un AVE directo a Valencia pasando por Cuenca), la cúpula autonómica del PSPV se ha negado a opinar. La tesis es que entrar en el debate de los trazados no reporta beneficios electorales y es el PP el que de momento debe lidiar con la decisión.

Pero esta discreción se reventó ayer en Alicante. Si los socialistas ganan las elecciones generales del 12 de marzo, el AVE Madrid-Comunidad Valenciana entrará en funcionamiento "en menos de cuatro años" y lo hará por la opción sur o por la integral, según el compromiso electoral anunciado ayer por Jesús Caldera, portavoz adjunto del PSOE en el Congreso y portavoz de su partido en la comisión de Infraestructuras, en cuyo seno se debate la modernización del sistema ferroviario español.

Caldera aprovechó ayer una visita de precampaña a Alicante para limitar a dos los trazados posibles, una elección que se basa en la valoración de criterios de "rentabilidad económica, escaso impacto ambiental, vertebración y tiempo de recorrido".

"Conjugar esos parámetros y conseguir dar satisfacción a Valencia, Alicante y Murcia con un tiempo de trayecto competitivo que no exceda de las dos horas es perfectamente posible", fijó como objetivos el diputado, que criticó lo que calificó de "mentiras" del gobierno autonómico de Zaplana, "que lanza ofertas indiscriminadas a todo el mundo".

Los datos que manejan los socialistas indican notables diferencias en el coste de las obras de las distintas opciones del trazado del AVE. "Debemos entender todos que los recursos son limitados, y además del AVE a la Comunidad Valenciana hay que hacer los de Valladolid, Portugal, Galicia y el norte de España". La opción más cara en lo que respecta a la Comunidad Valenciana implica una inversión de 850.000 millones de pesetas, "prácticamente el doble del trazado sur", añadió Caldera. El dirigente socialista arremetió contra las expectativas que Zaplana transmite a los valencianos. "Ya se ve como maquinista", criticó irónico tras recordar que el presidente autonómico llegó a anunciar el inicio de las obras el año pasado.

Las declaraciones de Caldera dejaron fuera de juego al PSPV. Ayer, Daniel Gozalbo, portavoz de Infraestructuras del Grupo Socialista-Progresistas en las Cortes Valencianas, calificó de "error" tomar partido por una opción y consideró la elección de Caldera como una apuesta personal. "Lamento que el señor Caldera entre en ese debate", dijo Gozalbo, para después fijar la postura general del PSPV, basada, al igual que la de Zaplana, en el tiempo: "La opción que queremos tiene que asegurar un tiempo mínimo de viaje entre Madrid y las tres capitales valencianas de forma que nunca se superen las dos horas. De esta forma se asegura que ninguno de los trazados, ni los muy al norte ni los muy al sur, margina a alguna zona de la Comunidad Valenciana". También aseguró que la bifurcación de la Y que suponen los ramales a Valencia y Alicante no debe estar lejos de estas ciudades para asegurar la perfecta vertebración del la Comunidad.

"Inoportuno"

Gozalbo también afirmó que Diego Macià, presidente de la Gestora del PSPV, está permanentemente en contacto con el PSOE, por lo que la formación nacional conoce perfectamente la postura de los socialistas valencianos."Hubiera sido inoportuno y un error optar por un trazado", declaró Gozalbo.

Mientras, las declaraciones de Caldera causaron contrariedad en el Grupo Socialista en el Ayuntamiento de Valencia, que ha apostado firmemente los últimos meses por el trazado directo. Su portavoz, Ana Noguera, no quiso hacer manifestaciones hasta conocer mejor las declaraciones del diputado en Madrid.

Y Zaplana aprovechó el manifiesto desencuentro entre los socialistas para llamar la atención sobre la descoordinación del PSPV. "Viene un portavoz autorizado de Madrid para desdecir a los socialistas valencianos". Tampoco perdió la oportunidad de recordar que la apuesta de Jesús Caldera es la misma que la del ministerio.