Israel responde a Hezbolá con fuertes bombardeos sobre Líbano

La aviación israelí desencadenó ayer noche una operación de castigo de gran envergadura en Líbano como represalia por las últimas acciones de la guerrilla islamista shií de Hezbolá que terminaron con la muerte de cinco militares israelíes y el asesinato del número dos del Ejército de Liberación del Sur del Libano, la milicia aliada de las tropas israelíes. El primer balance oficioso de los bombardeos nocturnos consigna la destrucción de numerosas instalaciones guerrilleras, de cuatro centrales eléctricas y seis civiles con heridas leves.El ataque más importante y contundente de los aviones israelíes se produjo en los alrededores de la ciudad turística de Balbeek, la capital del valle de la Bekaa, situada a unos 100 kilómetros al este de Beirut, junto a la frontera siria, uno de los santuarios de la guerrilla islamista de Hezbolá, que goza en esta región del apoyo del Ejército de Damasco.

Pero, además, las fuerzas aéreas israelíes lanzaron sus misiles sobre los barrios industriales de los suburbios de Beirut y, en una demostración de osadía, cruzaron Líbano de sur a norte para bombardear incluso los alrededores y el puerto de Trípoli, ciudad situada a unos 200 kilómetros de la frontera israelí, donde destruyeron asimismo otras dos centrales eléctricas.

La incursión de los aviones israelíes se decidió ayer por la noche en una reunión extraordinaria del Gabinete de Seguridad del primer ministro, Ehud Barak, quien, presionado por los sectores más duros del Ejército y de la oposición derechista Likud, dio el visto bueno a una operación de represalia a costa de complicar aún más las negociaciones de paz con Siria, patrocinadas por Estados Unidos, y que se encuentran congeladas desde el pasado 10 de enero.

Castigo para los "agresores"

"El ejército de Israel actuará de manera que los que atacan en el sur de Líbano serán golpeados en su momento, porque no es concebible que se pueda continuar atacando el Ejército de Israel sin que los agresores y aquellos que los envían sean castigados", había asegurado Barak este fin de semana cuando parecía incapaz de sustraerse ya a las presiones de los sectores duros del Ejército que reclamaban una respuesta contundente e inmediata contra Hezbolá.

La operación de castigo de la aviación israelí es una replica exacta de la operación desencadenada el pasado mes de junio, cuando bombardearon numeros objetivos industriales y civiles de Beirut en respuesta a las agresiones de Hezbolá contra la población civil del norte de Israel, sobre la que lanzaron varios misiles. Aquel ataque supuso para los ciudadanos de Beirut el corte del suministro de electricidad y de agua durante los meses más calurosos del verano.

El Gobierno israelí espera una respuesta de los islamistas, por eso, anoche, pocas horas antes de que los aviones despegaran de sus bases, las autoridades militares y civiles del norte de Israel dieron orden a los 300.000 ciudadanos de la zona para que bajaran a los refugios, donde seguramente permanecerán durante algunos días.