"Lavapiés y Tirso de Molina parecen arrabales argentinos"
Cuando llegó a Madrid, de eso hace ya casi veinticinco años, Graciela Giordano (Buenos Aires, 1952) tuvo la mala suerte de que le robaran la guitarra. Además, olvidó en un taxi la agenda con los teléfonos de las personas que supuestamente iban a ayudarla en el nuevo camino que se abría a sus pies. Tan sólo tenía 20 años y unas ganas inmensas de vivir, así que tuvo que empezar de cero, de la nada. Convencida de que lo suyo era el tango, fue de bar en bar y de restaurante en restaurante para darse a conocer, hasta convertirse en "la voz del tango en España", como la llama la crítica. Actualmente es la directora artística del Festival de Tangos de Alcantarilla, en Murcia, el más antiguo de España. Ahora ha vuelto a los escenarios con su Homenaje al tango. Pregunta.¿Para usted, qué es el tango?
Respuesta.Para mí encierra muchas cosas. Es una forma de expresar sentimientos universales. La tristeza, la nostalgia, la alegría, el desamor; todo se puede expresar a través del tango. Para mí es oxígeno puro.
P.¿Se siente reconocida en España?
R.Sí, pero ha sido difícil. Aunque el tango se ha puesto de moda, sigue siendo complicado, porque lo que más se está dando a conocer es la danza, y yo defiendo la poesía, las canciones.
P.¿Cree que esta música, tan llena de nostalgia logra calar en los españoles?
R.Por supuesto. Pero ha costado mucho, porque mucha gente se ha quedado con las letras de unas cuantas canciones, las más conocidas, y se han olvidado de otras. Cuando cantas Caminito, Gyra, Gyra o A media luz es fácil arrancar los aplausos del público, pero yo intento que se conozcan los nuevos tangos, las nuevas letras.
P.¿Hay algunas zonas de Madrid que le recuerden los arrabales, esos barrios populares de Buenos Aires donde nació el tango?
R.En esos barrios era a donde llegaban los inmigrantes, era donde más se bailaba. A mí se me ocurre como zonas parecidas Lavapiés, Tirso de Molina y Malasaña, pero sobre todo Lavapiés.
P.En sus comienzos el tango era interpretado y bailado en los prostíbulos, ¿fue muy difícil para las mujeres adentrarse en ese ambiente?
R.Todavía sigue siendo difícil. El tango nació en los prostíbulos y ha tenido siempre ese cliché machista. Ha costado mucho superarlo. Incluso sé de muchísimas mujeres que tuvieron que masculinizarse para cantar tangos. A veces a mí me preguntan si canta conmigo un hombre.
P.Cada vez hay más auge de escuelas de tango, ¿no?
R.Pero todo está enfocado por la danza; yo quiero dejar claro que el tango no es sólo danza, también música y poesía.
Graciela Giordano actúa hoy en el Café Concierto La Fídula. Huertas, 57. Teléfono 914292947. Pases a las 23.30 y 1.00.
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