Villalonga dispone de opciones sobre acciones de Telefónica por valor de 3.500 millones

Café para todos. Así, de un plumazo, pretende resolver el presidente de Telefónica, Juan Villalonga, la polémica sobre los sobresueldos para un grupo selecto de directivos de la primera empresa española que él mismo programó en 1997. Villalonga prometió, ante la junta extraordinaria que ayer aprobó la mayor ampliación de capital en la historia de Telefónica, que extenderá el programa de opciones sobre acciones (stock options) a todos sus empleados y que actuará con absoluta transparencia sobre las retribuciones en la compañía. Telefónica de España cuenta con 46.000 empleados y el grupo con 110.000 en el mundo.Para dar ejemplo, reconoció que él ya tiene asegurado el 3,45% de los planes de opciones, lo que le reportará más de 3.490 millones de pesetas en metálico después de que la junta ordinaria de accionistas (prevista para el mes de abril) apruebe este sistema de retribuciones. Ello supone retrasar la fecha del 25 de febrero, en la que teóricamente acaba el plazo de tres años firmado por los directivos en 1997.

El orden del día se dedicaba ayer a la ampliación para absorber las filiales latinoamericanas y a la aprobación de los nombramientos como consejeros de José María Mas Millet, presidente de Antena3; Luis Martín de Bustamante, responsable de Telefónica Móviles, y Antonio Viana, presidente de DataCorp. Finalmente la ampliación tiene un valor nominal de 922 millones de euros (153.407 millones de pesetas), que la compañía ha cifrado en 4,32 billones de pesetas según el precio de cierre de la Bolsa el jueves pasado. Villalonga había adelantado que no quería tratar el polémico asunto de los sobresueldos, pero no pudo evitar que las opciones se convirtieran en el asunto estrella durante el turno de ruegos y preguntas que protagonizaron los accionistas minoritarios desde una sala separada de la que acogía al consejo.

Cuando llegó el momento de las aclaraciones, Villalonga, duramente criticado por los pequeños accionistas que intervinieron, pasó a la ofensiva y, en un esfuerzo por rebajar la importancia de las retribuciones para directivos, proclamó que "Telefónica va a ser el líder de la transparencia". Se puso al frente de la manifestación y dijo que "el presidente de Telefónica tiene el 3,45% de los planes de opciones de la compañía", que existen también en las filiales Terra y TPI-Páginas Amarillas.

Después, un portavoz oficial aclaró que se refería a los planes a los que está suscrito (RISE para 100 ejecutivos del grupo y TOP para otros 450, porque también estaba en el Telefónica Internacional, pero se ha suspendido), que habrían reportado a Villalonga un total de 3.490 millones de pesetas (unos 2.560 por el RISE y el resto por el TOP) si hubiera podido ejercer ayer sus derechos. No podrá hacerlo, sin embargo, hasta que la junta ordinaria de accionistas apruebe este sistema de retribuciones y se detalle ante la CNMV. A la cantidad que le corresponden a Juan Villalonga por sus opciones se añaden 8.891 millones en títulos de la operadora que posee directamente, según la última comunicación al respecto enviada a la CNMV.

Villalonga, que se encargó de desactivar cualquier ataque contra las opciones asegurando que "las stock options se extenderán a todos los empleados" de Telefónica. No precisó cómo, pero aprovechó la presencia de representantes sindicales en la sala para subrayar que se buscará conjuntamente un mecanismo para que "todos los trabajadores se beneficien". Añadió que se va a aprobar un programa para que los empleados puedan comprar acciones, con descuentos, con cargo en la nómina. Fuentes de la dirección de Telefónica,

señalaron que una de las posibilidades en estudio es que las opciones se distribuyan como paga extraordinaria.