El día de McCain
Las arcas de George Bush están más llenas -dispone ya de unos 11.000 millones de pesetas para su campaña, cinco veces más que John McCain-, pero en su primer enfrentamiento, en las primarias de New Hampshire, el senador de Arizona le ha robado el papel estelar en el campo republicano al gobernador de Tejas, hijo del presidente de mismo nombre. La carrera no ha hecho más que empezar: no es nada seguro que el día de McCain pueda convertirse en su año triunfal.En New Hampshire, McCain ha sacado 18 puntos a Bush. Sin duda se ha beneficiado de que en estas primarias (lo que no ocurre en todas) han podido votar muchos independientes que han apoyado al senador frente a un Bush que representa al corazón del Partido Republicano y al establishment. McCain, que se ha empleado a fondo en New Hampshire, ha recibido un apoyo general: de jóvenes y mayores, varones y mujeres, ricos y pobres, aunque este Estado no sea reflejo del mosaico racial en el que se está convirtiendo EE UU.
McCain es un héroe nacional. No sólo porque combatió en Vietnam, sino porque fue capturado en 1967, después de ser derribado su avión, y se negó a ser liberado antes que sus compañeros sólo porque su padre fuera a mandar la flota del Pacífico. Resultado: permaneció casi seis años cautivo en Hanoi. Mientras, Bush, también aviador, protegía los cielos de Tejas, como dijo McCain. Tras el impulso de éste hay mucho más que un pasado: es todo un estilo dicharachero y punzante, con unas propuestas moderadas que le sitúan en el centro político. Al marcado recorte de los impuestos que propone Bush, McCain ofrece uno mucho menor y el uso del superávit presupuestario para mejorar la seguridad social. Milita también por una reducción de las donaciones a los partidos y los gastos de las campañas. ¿Ilegalizar el aborto? McCain cree que se generarían profundas tensiones y divisiones sociales.
En el campo demócrata, el vicepresidente Al Gore se ha impuesto sólo por dos puntos sobre su principal contendiente, el senador Bill Bradley. Todo está abierto en este proceso de preselección del que está llamado a convertirse en el hombre más poderoso de la Tierra. De ahí que las primarias interesen al mundo entero, aunque sólo puedan votar los norteamericanos.
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