Izquierda Unida exige a los socialistas una reunión "urgente" para plantearles una contraoferta
Francisco Frutos, el cabeza de lista de IU, respondió ayer rápidamente a la propuesta del PSOE exigiendo una reunión "urgente" de ambas direcciones para estudiar si es posible llegar a un acuerdo programático. A partir de ahí su organización plantearía una contraoferta al PSOE, ya que la pretensión de los socialistas de que no se presente en 34 provincias no es asumible, según sus dirigentes. Frutos la criticó en su rueda de prensa, aunque indirectamente. La estrategia de IU es no resaltar los aspectos negativos de la proposición del PSOE para que sea este partido el que, en todo caso, rompa la negociación.
Los dos máximos órganos ejecutivos de IU, el comité de notables y la Presidencia federal, han sido convocados urgentemente para hoy con la intención de estudiar la propuesta del PSOE y ratificar la estrategia a seguir. Francisco Frutos ya emitió ayer un comunicado y concedió una rueda de prensa para exigir una reunión urgente de las dos direcciones. En IU se hablaba ayer de pasado mañana, jueves, como la posible fecha de la misma.La primera reacción en IU tras el análisis de la carta socialista fue la de no hacer sangre sobre lo que muchos dirigentes definen en privado como una propuesta envenenada: la exigencia de que la coalición no se presente en las 34 provincias en las que nunca ha obtenido un diputado. Creen que, si la criticaran abiertamente, quedarían ante la opinión pública como los culpables de la ruptura, algo que no se pueden permitir debido a las pésimas expectativas electorales que sobrevuelan sobre sus decisiones.
La estrategia de IU es clara. Primero, exigir una reunión para tratar de lograr acuerdos programáticos. Si se alcanzaran, se podría negociar una contraoferta para las elecciones. Para su cúpula, no es planteable la retirada en 34 provincias. Pero, si se estableciera un clima de concordia, ve posible buscar otro tipo de fórmulas, como las listas conjuntas o el apoyo a independientes.
De todas formas, muchos dirigentes creen que lo único que se está jugando es quién rompe la baraja para luego usar eso en contra del otro en la campaña electoral. Y por eso están tan convencidos de que hay que jugar a la ofensiva y hacer una contraoferta al PSOE para tratar de acorralarlo y evitar que pueda convencer al electorado potencial de IU de que ha sido la coalición la que se ha negado a pactar con los socialistas.
"No íbamos de farol"
Por eso y a expensas de lo que hoy proponga el comité de notables y decida finalmente la Presidencia federal, Frutos quiso ayer dejar muy claro que IU recoge de manera "muy positiva" la oferta de Gobierno del PSOE y exige una reunión para debatir los extremos del acuerdo. "Nosotros no íbamos de farol" al ofrecer en varias ocasiones, incluso a través de una carta suya a Joaquín Almunia, un pacto con los socialistas, dijo. Frutos se mostró, de forma casi irónica, muy contento por que el PSOE haya cambiado de táctica y pueda asumir "que haya ministros en su Gobierno que estén en contra de la OTAN".
El también secretario general del PCE calificó de "genéricos" los 10 puntos que ofrece Almunia en su carta, por lo que exigió esa reunión de manera urgente para aclarar cómo se pueden concretar, de manera programática y presupuestaria, esos aspectos. Y puso dos ejemplos: respecto a las pensiones, según el comunicado de Frutos, "hay que garantizar que la mínima se equipare al salario mínimo interprofesional". Además, añadió, "es preciso abordar temas que hacen referencia al desarrollo democrático y al Estado de derecho".
Frutos no quiso ayer destacarlos públicamente, pero, aparte la exigencia de los socialistas de que no se presenten en 34 provincias y pidan en ellas el voto para el PSOE, hay otros asuntos que se consideran inaceptables tal y como están planteados. Dos de ellos son claves. Uno: el texto de Almunia exige el "mantenimiento de nuestros compromisos internacionales en materia de seguridad y defensa". Eso equivale a defender la pertenencia a la OTAN, tema tabú en IU. El otro: la asunción de los compromisos sobre el control del déficit público establecidos en el Pacto de Estabilidad firmado por todos los países de la Unión Europea, algo que los dirigentes de la coalición siempre han combatido.
Frutos no quiso hacer mella sobre la exigencia de que IU se retire en 34 circunscripciones, y se mostró confiado en que no sea "innegociable". Su crítica a esta inciativa se basó sobre todo en que, en su opinión, es un "error" pensar que la retirada de la coalición implicaría automáticamente que sus votantes se trasladaran hacia el PSOE. Lo que habría que hacer, según el candidato, es crear el clima necesario para que las personas "de izquierdas" que se refugian desde hace años en la abstención porque han perdido confianza en las propuestas tanto del PSOE como de IU se vuelvan a "movilizar".
Frutos está siendo la cara visible de la coalición desde que el coordinador general, Julio Anguita, sufriera el pasado diciembre una operación de corazón de la que aún está convaleciente. Fue el también secretario general del PCE el que ayer, junto a Víctor Ríos, secretario de la coordinación colegiada, decidió responder rápidamente y de forma positiva a la oferta de Almunia. Anguita, sin embargo, estuvo por la mañana en la sede para interesarse por los extremos de la oferta socialista y hoy reaparecerá públicamente en la presentación de los candidatos de su organización a las elecciones generales.
